¡ Cómo pasa el tiempo !

Recuerdo cuando salió ésta película y la anoté para verla en breve, tan breve que han pasado 4 años ya.

Lo más que me llamó la atención desde el principio fue el dúo de protagonistas, tener a Helen Mirren y a Ian McKellen en la misma película, te asegura ya que te lo vas a pasar bien, independientemente que la peli te guste más o menos.

La gran mentira es de esas películas que te enganchan desde el primer momento y en la cual el espectador tiene siempre la mosca detrás de la oreja, porque está viendo cosas, pero no sabe si es real, si es pactado, si más adelante pasará algo que nos aclare todo. Si todo esto lo disfrutas durante 110 minutos, el entretenimiento está asegurado.

La historia va sobre un señor mayor, el abuelo perfecto podríamos decir, que sigilosamente va conociendo a personas acaudaladas, para con ayuda de un amigo, conseguir estafarlos y hacerse con parte de sus bienes, cuantos más mejor. Pero cuando aparece Betty en su vida, la cosa se convierte más que un simple trabajo, ya que ella acaba de enviudar recientemente y poco a poco le abre las puertas de su casa y de su vida. Su nieto Steven, no se cree nada de lo que rodea a este señor y se lo hace saber a su abuela constantemente, creando un mal ambiente entre ellos.

Pero ni todo lo que reluce es oro, ni todo el monte es orégano. Y veremos a medida que avanzan los hechos, que no sólo Ray esconde secretos y cartas en la manga, sino que Betty también y de qué manera.

Me ha parecido una historia muy entretenida con giros de guión muy de mi gusto.