Creo que desde que el ser humano pisó el planeta tierra por primera vez, ha tenido el ansia de superarse más allá de sus propios límites en todos los sentidos, ¿los motivos verdaderos? Son muy pintorescos y variados. Fama, poder, reconocimiento, ego, autoestima, promesa...


Everest es el ejemplo claro de esta afirmación. Es mi opinión personal y nunca me considero en poder de la verdad absoluta, pero jamás pondría mi vida en juego por mucho amor que le tenga a una pasión o a un hobby. Para mí no es de recibo ese gran sacrificio. La vida es muy bonita para jugármela a GAME OVER por nada.

Baltasar Kormákur aprovecha un hecho real para enganchar a la gente a esta historia de poner al límite la resistencia humana, y para ello nos lleva a las montañas y no a una cualquiera, al Everest. Con una disparidad de personajes de diferentes ideales y nacionalidades y lo más curioso, con diferentes motivos que los han llevado a estar allí. Cómo hecho curioso, resaltar que es un deporte muy caro según los datos, el minuto de llamada al exterior 25$ y la inscripción para estar allí 65.000$ ¡¡¡ hablamos del año 1996 !!! saquen sus propias conclusiones. Es como si yo le entregase los ahorros de toda mi vida a alguien para jugarnos una partida a la ruleta rusa, pero sin obtener ganancias si la gano, solo por diversión. Una auténtica locura que entre más lo pienso, menos lo llego a entender.

Me ha gustado el buen rollo de los monitores de los diferentes grupos, ya que después de todo, son rivales en el negocio de subir grupos de escaladores hasta la cima, sin embargo, no sólo reina sinceramente el ambiente cordial en lo deportivo, sino en el trato humano, facilitando cada uno la ayuda cuando realmente hace falta. Los personajes varios le dan mordiente a la historia, el futuro padre que habla con su esposa embarazada y le da hasta el nombre que debería llevar, el que se juega su divorcio por volver a la montaña, la que quiere coronar la séptima cima para engrandecer su curriculum, el que lo hace para demostrar a unos chavales que se puede lograr todo lo que uno se proponga en la vida. Son diferentes las motivaciones de cada individuo con los que nos encontraremos en la pantalla. Está muy bien rodada y presentada, explicando en todo momento el tema de los diferentes campamentos bases y sus distancias a la cima, y como se organiza una escalada de esas dimensiones. Viviéremos como no momentos de auténtico dramatismo, sino una aventura en la montaña no se llamaría aventura y como el ser humano es capaz de forzar la máquina hasta más allá de sus propios límites por hacer historia y como el instinto de supervivencia no te abandona ni en las situaciones más graves.

Una película entretenida y con un mensaje que por lo menos a mi, me ha llegado muy interiormente.