Media votos
6,4
Votos
2.672
Críticas
51
Listas
4
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de ChusCo:
6
6,4
4.964
Drama
Joan Castleman (Glenn Close) es una buena esposa, de belleza madura y natural, la mujer perfecta. Pero lo cierto es que lleva cuarenta años sacrificando sus sueños y ambiciones para mantener viva la llama de su matrimonio con su marido, Joe Castleman (Jonathan Pryce). Pero Joan ha llegado a su límite. En vísperas de la entrega del Premio Nobel de Literatura a Joe, Joan decide desvelar su secreto mejor guardado. (FILMAFFINITY)
22 de octubre de 2018
44 de 57 usuarios han encontrado esta crítica útil
Que lastima que el maniqueísmo haya echado a perder esta película.
Iba bien encaminada, pero decide ir a lo fácil y en lugar de profundizar en la compleja relación de los protagonistas, opta por tirar de lugares comunes del discurso feminista. (No me quejo del discurso feminista, me quejo de que no explica el pacto entre los protagonistas y cómo han podido mantenerlo a lo largo de los años).
Se salva, con nota, Glenn Close y el resto de actores.
Mas en zona spoiler,
Iba bien encaminada, pero decide ir a lo fácil y en lugar de profundizar en la compleja relación de los protagonistas, opta por tirar de lugares comunes del discurso feminista. (No me quejo del discurso feminista, me quejo de que no explica el pacto entre los protagonistas y cómo han podido mantenerlo a lo largo de los años).
Se salva, con nota, Glenn Close y el resto de actores.
Mas en zona spoiler,
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Un profesor de literatura o de escritura sin suficiente talento literario se enrolla con su alumna, que resulta ser una escritora brillante.
Deciden ambos que él será "el escritor" y ella quien "le corrige" los textos. Y ello por razones prácticas (las mujeres no encuentran editor), de carácter (ella es muy tímida) y sentimentales (ella le adora, pese a que él es un soberbio, que se cree mejor de lo que es, y al no serlo, resulta un acomplejado) Y así empiezan a publicar y triunfan hasta el punto de que ganan el Nobel, ya a los 70 o así.
Y se llevan de maravilla, sin que el fraude parezca haberles afectado ni personalmente ni como pareja.
Sin embargo, tras la concesión del Nobel su relación se tambalea. De repente una elección libre, que parecía haber contentado a ambos y haberles dado una buena vida, se pone en cuestión.
Parece lógico y legitimo que ella se replantee si ha hecho bien, en vista de que como escritora habría podido tener el máximo reconocimiento.
Pero es que este cuestionamiento está muy forzado, porque, de repente, el personaje del marido empieza a aparecer, en el presente y en retrospectiva, como un cerdo y como un autentico patán.
Al parecer le ha puesto los cuernos a ella incontables veces, es de los que tira la ropa al suelo (con 70 tacos) para que se la recojan, y para colmo, de escritura no tiene ni la mas remota idea, que es lo mas grave.
Por simplificar la historia, se prescinde hasta de hechos asentados, como que él está dotado de más imaginación que ella, y es el que aporta al tándem creativo argumentos y o tramas. Esta simbiosis de los dos se ignora a partir de un momento, en el que se opta por la mas burda caracterización de ambos, pivotando sobre lugares comunes del machismo versus feminismo. La manera de contarlo a veces da sonrojo .
Encima el hijo de ambos, también escritor, tiene una pésima relación con su padre, por aquello de que el padre es un genio y el hijo no consigue su aprobación. Cuesta creer que la madre haya tolerado esta situación, porque dejar al marido que vuelque su frustración en el chico no me parece que pueda entrar en el trato que ellos tenían. Resulta patético que el defraudador se las de de gran hombre con su hijo y mas cuando está la madre/escritora delante. Cuando nos enteramos de que el padre es un impostor, lo que parecía falta de generosidad de un genio literario o torpeza de padre patoso se convierte en pura agresión, por lo que no parece normal que la madre lo tolere como si fuera algo menor.
Por su parte, ella, pese a tener un talento digno de ganar el Nobel es presentada como una mujer sólo pendiente de su marido (que no tenga migas en la barba, por ejemplo) y sin la mas mínima inquietud intelectual. Y ello hace que parezca que entre ellos no ha podido haber la mas mínima complicidad.
En fin, que si no existe el supuesto equilibrio y buen rollo entre ellos, la historia es inverosímil. Mucho antes de llegar a la vejez y al Nobel tendría que haber saltado por los aires.
Deciden ambos que él será "el escritor" y ella quien "le corrige" los textos. Y ello por razones prácticas (las mujeres no encuentran editor), de carácter (ella es muy tímida) y sentimentales (ella le adora, pese a que él es un soberbio, que se cree mejor de lo que es, y al no serlo, resulta un acomplejado) Y así empiezan a publicar y triunfan hasta el punto de que ganan el Nobel, ya a los 70 o así.
Y se llevan de maravilla, sin que el fraude parezca haberles afectado ni personalmente ni como pareja.
Sin embargo, tras la concesión del Nobel su relación se tambalea. De repente una elección libre, que parecía haber contentado a ambos y haberles dado una buena vida, se pone en cuestión.
Parece lógico y legitimo que ella se replantee si ha hecho bien, en vista de que como escritora habría podido tener el máximo reconocimiento.
Pero es que este cuestionamiento está muy forzado, porque, de repente, el personaje del marido empieza a aparecer, en el presente y en retrospectiva, como un cerdo y como un autentico patán.
Al parecer le ha puesto los cuernos a ella incontables veces, es de los que tira la ropa al suelo (con 70 tacos) para que se la recojan, y para colmo, de escritura no tiene ni la mas remota idea, que es lo mas grave.
Por simplificar la historia, se prescinde hasta de hechos asentados, como que él está dotado de más imaginación que ella, y es el que aporta al tándem creativo argumentos y o tramas. Esta simbiosis de los dos se ignora a partir de un momento, en el que se opta por la mas burda caracterización de ambos, pivotando sobre lugares comunes del machismo versus feminismo. La manera de contarlo a veces da sonrojo .
Encima el hijo de ambos, también escritor, tiene una pésima relación con su padre, por aquello de que el padre es un genio y el hijo no consigue su aprobación. Cuesta creer que la madre haya tolerado esta situación, porque dejar al marido que vuelque su frustración en el chico no me parece que pueda entrar en el trato que ellos tenían. Resulta patético que el defraudador se las de de gran hombre con su hijo y mas cuando está la madre/escritora delante. Cuando nos enteramos de que el padre es un impostor, lo que parecía falta de generosidad de un genio literario o torpeza de padre patoso se convierte en pura agresión, por lo que no parece normal que la madre lo tolere como si fuera algo menor.
Por su parte, ella, pese a tener un talento digno de ganar el Nobel es presentada como una mujer sólo pendiente de su marido (que no tenga migas en la barba, por ejemplo) y sin la mas mínima inquietud intelectual. Y ello hace que parezca que entre ellos no ha podido haber la mas mínima complicidad.
En fin, que si no existe el supuesto equilibrio y buen rollo entre ellos, la historia es inverosímil. Mucho antes de llegar a la vejez y al Nobel tendría que haber saltado por los aires.