Sin duda esta saga da mucho de sí en el cine infantil pero que también puede ser difrutado por adultos.

En esta tercera entrega nos encontramos con una historia curiosa pero simplona y bastante inverosímil. Los nuevos personajes son una parte esencial en el entretenimiento que causa la cinta; los pequeños dinosaurios son bastante simpáticos y la nueva mamut, toda una monada. Pero una vez más, lo mejor es la historia entre las ardillas, prácticamente donde se basan la mayoría de las risas.

No obstante, se basa demasiado en la historia entre los mamuts y es demasiado seria en ese aspecto. El personaje del dinosaurio malvado y el de la comadreja no convencen del todo, y la resolución de la historia, menos aún.

En conclusión, entretenida tercera parte, no dudo en que vaya a haber una cuarta, y la verdad, no me molestaría...!