No me canso de ver esta película. Realmente creo que es una obra maestra, y no coincido en que es una película poco profunda disfrazada con cuarenta planos por segundo y varias tomas con cámaras poco usuales.
El detalle que creo que la hace excelente es como cada segundo de la película dice algo, tal vez no en el guión, pero el uso de cámaras, los colores, la rapidez de los planos, la increíble banda sonora, todo está donde está por una razón.
Tampoco comparto que sea igual a una propaganda de una Fundación contra la drogadicción. Simplemente es realista, las drogas son un tema complicado, y llevadas al nivel de adicción se vuelven un problema real. Si bien concuerdo en que algunos de los hechos son un poco descabellados, creo que no es algo que en esta película tenga importancia, porque como ya dije lo importante son los cientos de mensajes que transmite con esos cientos de planos que usa.
En resumen, tiene actuaciones muy buenas: Ellen Burstyn está SOBERBIA, y no puedo creer que haya perdido un oscar contra Julia Roberts, Jennifer Conelly también está excelente, y Jared Leto y Marlon Wayans están de bien para arriba.
La banda sonora complementa muchísimo a la película, y creo que el tema de la repetición es intencional, y tiene sentido de la forma en que está ensamblado con las imágenes.
El manejo de las cámaras es excelente, la sensación de aislamiento que produce la snorri, el vértigo de la cámara que vibra, los planos ligeramente inclinados de algunas tomas, etc, le dan el ambiente que necesita la película, y ese toque de irrealidad dentro de la realidad que va tan bien con la historia que cuenta.

Puedo entender a quienes no les gustó la película, realmente es difícil de digerir, es terriblemente shockeante, y si esperás un guión completísimo te va a decepcionar un poco (aunque sostengo que el guión se da en las imágenes y en la música más que en los diálogos, es una película que transmite todo lo que transmite a través de lo audiovisual), pero no creo que se pueda decir llanamente que es mala...