Rambo III es en mi opinión la más floja de las cuatro. Esta vez el incombustible John Rambo sale de su retiro espiritual en Tailandia y se lanza a salvar a su amigo el coronel Trautman que ha sido capturado por los soviéticos en Afganistán. Con la ayuda de los feroces talibanes que en aquella época eran colegas de los americanos, cosas de la vida, consigue diezmar con éxito al ejército ruso hasta averiguar el paradero de su amigo.

Más de lo de siempre pero por duplicado y con menos emoción. Al final acabas cansado de tanto tiro y explosión por todas partes. Lo mejor es la escena en la que Stallone se cura una herida en la cintura con pólvora y cuando un afgano le pregunta a Rambo qué es el tubo que sostiene en la mano y Rambo le contesta que es una luz azul y para que sirve, vuelve a inquirir el afgano, se vuelve azul le responde Rambo.