Haz click aquí para copiar la URL
España España · Madrid
Voto de OsitoF:
8
Thriller Basada en la vida real de Barry Seal, un piloto de la TWA reclutado por la CIA que se convirtió en un importante narcotraficante que movía droga para el cartel de Medellín de Jorge Ochoa y Pablo Escobar entre los Estados Unidos y Centroamérica, viéndose involucrado en importantes sucesos de los años 80 como el escándalo Irán-Contra. (FILMAFFINITY)

7 de julio de 2020
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
“Barry Seal” pertenece a esa tendencia actual de contar historias serias con aire cómico, superficial, frívolo, que, en el caso de películas como esta que cuentan hechos reales de repercusiones serias, supongo que pretende reforzar la paradoja de que sucesos graves hayan sido provocados por dirigentes mediocres y decisiones disparatadas basadas en poca información o poca capacidad para el mando.

Interpretado por el siempre encantador Tom Cruise, Barry Seal es un ingenioso piloto de poca monta que supo ver la oportunidad de enriquecerse hasta límites obscenos aprovechándose de la incompetencia del Gobierno de EEUU y sus agencias secretas, de la ingenuidad de movimientos guerrilleros centroamericanos y la prepotencia de cárteles de la droga. Como un malabarista que intenta mantener en el aire toda clase de objetos y que una vez que lo consigue no puede detenerse sin que todo se venga abajo, Seal jugó a varias bandas mintiendo a unos y a otros para convertirse en una leyenda del narcotráfico de la que hemos oído referencias en “Narcos” y otras películas del estilo devorado por su propio éxito.

También es cierto que las diferentes referencias a su persona en el cine y la TV no suelen coincidir en el rol que desempeñaba más allá de que era el piloto favorito de Pablo Escobar, lo que viene a indicar que realmente nadie sabe – ni llegaremos a saber- quién era realmente Barry Seal y dónde terminaba la persona y empezaba el mito. Pero como es de imaginar, esa biografía de aventurero plagada de lagunas es ideal para que un buen guion y el talento de Cruise para interpretar pícaros generen una película trepidante y divertida de ver con una dinámica sencilla: describir la escalada de Barry Seal en el escalafón del tráfico de drogas banalizando su participación y ridiculizando a todos los que ‘trabajaron’ con él, haciendo ver que eran todos unos brutos a los que toreaba con su sonrisa, con su inteligencia y su buena estrella. Para eso, el montaje es ágil y no duda en intercalar cuantos flashbacks o declaraciones reales descontextualizadas hagan falta para presentar un cuadro de pocas luces entre la gente que manda.

Es muy raro que Cruise haga una película que, de una forma u otra, no entretenga o divierta… y este no es el caso. “Barry Seal” engancha desde el minuto cero, está muy bien hecha e, independientemente de que lo que cuente sea contrastable o una pura licencia, está perfectamente narrada para que no nos perdamos con todo el lío de fechas, personajes y lugares. Eso de presentar a un personaje ocho veces si es necesario para que no quede duda de su papel en la historia – que en el cine europeo es una aberración estructural, un insulto a la capacidad del director, una piedra en el camino hacia la perfección armónica – no supone aquí un problema porque se prioriza que el espectador no se pierda. Bravo. El principal defecto es que Tom Cruise es tan, tan encantador, que corremos el riesgo de elevar la figura de Seal a los altares y blanquear -no es un chiste fácil- las acciones de una persona, cuando menos, controvertida.

Confiando en la inteligencia del espectador para entender que la película no hace apología de la cocaína, “Barry Seal” es un trepidante espectáculo de dos horas de los que te tienen dos horas pegados a la pantalla soltando adrenalna.
OsitoF
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?

Últimas películas visitadas
Por tu amor (Serie de TV)
1999
Luis Eduardo Reyes
arrow