¿Qué fuerzas misteriosas actuaron conjuntamente para que en los años sesenta del pasado siglo se produjera aquella explosión de creatividad cultural en... nada menos que Checoslovaquia? Un maravilloso misterio, algo único que no creo que tenga respuesta a través de argumentos lógicos. En cine, que es lo que nos interesa, "El barón fantástico" me parece un experimento extraordinario que ningún seguidor de la animación debería perderse, una verdadera joya que merece más nota seguramente de la que le pongo yo. ¿Una rareza?; ¿cine de minorías?; ¿cine poco conocido?... Más allá de los píxeles y el 3D, la industria digital y esos indudables espectáculos visuales, más de cincuenta años ya, Karel Zeman se inventó una historia loca, surrealista, apta para todos las edades, rara y atractiva.

Me parece maravillosa la idea que se nos propone sobre la luna: que sea propiedad de los poetas, que sea uno de sus consagrados recursos, es algo de siempre... Y de los enamorados, patrimonio de las parejas que se aman, desde luego... ¿Y de los locos?; los lunáticos, gente inclasificable capaces, ¿por qué no?, de crear pequeñas obras como este "El barón fantástico"... Gracias a la luna entonces ¿no?

En estos escasos 80 minutos hay tiempo de quedarse absorto viendo caballos que vuelan en lo alto, casi en el firmamento, cañonazos y asaltos a fortalezas, a Cyrano en la luna lanzando su sombrero al universo (me río de "Interestellar", año 2014)... y tantas y tantas cosas al alcance de la imaginación. Una película imprescindible caramba!!!