Media votos
6,8
Votos
216
Críticas
2
Listas
1
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
- Sus redes sociales
-
Compartir su perfil
Voto de Leithient:
9
8,1
37.281
Intriga
A casa de dos estudiantes van llegando los invitados a una especie de fiesta de fin de curso. El invitado que más temen es su tutor y profesor, un astuto criminólogo que sostiene que el crimen perfecto no existe, aunque ellos se han propuesto demostrar lo contrario. En efecto, con su llegada crece cada vez más la tensión y el nerviosismo de los jóvenes. Y no es para menos, porque tienen un cadáver encerrado en el arcón que sirve de mesa para la cena. (FILMAFFINITY) [+]
17 de junio de 2009
6 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Plano secuencia. Sólo he podido contar tres cortes (los demás son imperceptibles), y por las exigencias de la época (los rollos de cinta no son eternos). Y brillante actuación de los actores, masculinos y femeninos. Especialmente, Edith Evanson, James Stewart y John Dall. Era la primera película de Hitchcock que veía. Como hasta la fecha sólo me ha pasado con las de Peter Greenaway y David Lynch, lo primero que pensé es: ya no se hace cine así. Es una de esas películas que, después de haberla visto, sigues recordando y cada instante te parece mejor, cada detalle que uno recuerda contribuye a hacer que merezca todavía más la pena haberse sentado 77 minutos delante de una pantalla.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
El argumento no tiene mucho misterio: dos estudiantes, homosexuales según los críticos (dato que me parece absolutamente irrelevante), asesinan a un tercero con el fin de transgredir las normas morales aceptadas por la sociedad. Nietzsche, por lo que parece. Después dan una fiesta, sirviendo la cena en el lugar donde han escondido al muerto. Aparentementen terrible, bello para ellos. Toda ella transcurre entre la pretendida superioridad de Brandon (John Dall) y un inseguro Philip (Farely Granger) que a punto está varias veces de dar al traste con todo el «crimen perfecto». El tercer personaje crucial es Rupert (James Stewart), que pasa toda la cena intuyendo lo que sucede y no sabemos si lo descubre o no hasta el final de la película, en la que vemos un brillante (aunque de interpretación quizá algo forzada) disgurso sobre interpretación de ideas.