Película basada en la historia real del boxeador Rubin “Huracán” Carter, que fue a dar con sus huesos en la cárcel por un crimen que no cometió. El film mezcla con acierto dos historias que terminan cruzándose, por un lado la del boxeador. Y por el otro lado, la de un adolescente que pese a su humilde condición goza de una beca para sus estudios, y que descubre casualmente las memorias de Huracán, escritas en la cárcel, donde habla de su vida e inocencia. Rubin comienza relatándonos parte de su infancia, él como y porqué un día entro en su vida el sargento Della Pesca, el cual contribuyó a confinar a Rubin a un internado y que posteriormente perseguirá hasta meter en la cárcel.

Retrata con sumo detalle la estancia carcelaria, transmite con una precisión demoledora hasta el punto de crear ansiedad cómo es esa vivencia, hace que al espectador le llegue lo que puede sentir un hombre encerrado en ese tugurio infernal, en el que la nada se apodera de tu vida, pues eres privado de tu libertad y del dominio sobre tus propios pensamientos, que están fuera. No tienes que desear nada de lo que haya ahí fuera, todo lo que desees tiene que estar aquí, dentro de esos muros. Tienes que encontrar algo que llene tu mente porque sino es imposible, te vuelves loco. Lo peor sin lugar a dudas es la impotencia que llegas a sentir, pues incluso en el improbable caso de que halles en este submundo hostil, por alguna circunstancia a alguien que te quiere prestar desinteresadamente su ayuda y apoyo, eres incapaz de corresponder y te desquicias contigo mismo, porque sin darte cuenta te vas creando esperanzas, y sientes que tienes que privarte de toda relación externa porque sino te derrumbas.

En la cárcel es todo diferente, hay autores y otras numerosas cintas que otorgan su personal aportación a la cuestión de hasta que punto son efectivos esos centros de internamiento, su utilidad y ayuda de cara al proceso de reformación del presidiario, debido al clima que se respira muchas veces en ellos es más que discutible, pues tienes todo el tiempo del mundo para pensar, y consecuentemente no paras de reflexionar acerca de los errores que hayas podido cometer a lo largo de tu vida, porque no tienes otra cosa mejor que hacer, ni manera de remediar eso que te has acordado que a lo mejor hiciste mal. Lamentas las oportunidades perdidas y lo que has dejado pendiente por hacer o realizar, que siempre suelen ser demasiadas cosas, da igual la edad que tengas y quién hayas sido, que también forman parte de la lista de los errores, de aspecto interminable y que siempre es mucho más extensa que la de los aciertos o logros que se te vienen a la mente en esos momentos de redundante reflexión.

La actuaciones son impecables, sobre todo la de Denzel Washington, que vuelve a ser asombrosa, soberbia. La cuál llevó a la nominación al Oscar. Ver la evolución del personaje, como su paso a paso le lleva a una madurez mental pero sin perder el sello que le distingue del resto. Cada día le admiramos más. Es un genio y en esta ocasión está extraordinario. Entre el resto del reparto destacan las actuaciones del joven Vicellous Reon Shannon (Lesra Martin), Dan Hedaya (Della Pesca), o John Hannah (Terry Swinton), los cuales realizan un trabajo muy bien logrado. Deborah Kara Unger (Lisa Peters) está correcta.

En definitiva, la historia de Rubin Carter es una más de las que refleja nuestra pobreza cultural a la hora de entender qué hace criminales a los llamados "criminales" y qué hace inocentes a los llamados "inocentes." Invenciones nuestras para mantener una idea de orden en el caos. No es la típica cinta de boxeo y cárceles. No deja indiferente a nadie, si tienes sentimientos humanos esta cinta te llega al corazón y te hace plantearte si en realidad somos tan diferentes al resto de los animales, al considerar que alguien simplemente por ser negro, ya va a ser un asesino. Este pensamiento no es fruto sino de nuestro profundo desconocimiento de otras culturas y de nuestra enfermiza obsesión de llenar de prejuicios todo aquello que pasa por delante de nuestros ojos. Es Imposible no emocionarse con esta película, desgarradora, profunda e increíblemente triste. Capaz de atravesar cualquier barrera sensitiva, capaz de golpear tus emociones de la manera más fuerte e inesperada.