Siempre he tenido debilidad por los dramas carcelarios pero esta película no ha sabido transmitirme lo que por ejemplo hicieron "El hombre de Alcatraz" o "Cadena perpetua"; la verdad es que he puesto el listón muy alto.

Estamos ante un film correcto por los pelos. Washington hace una interpretación estupenda, aunque no creo que sea para un Oscar, pero tiene su mérito. Quizás esta actuación y la estupenda banda sonora es lo que ayuda a ver la película.

En contra tiene varias cosas:

El guión se difumina, no mantiene un buen ritmo narrativo; el final es previsible y flojo; a pesar de ello estamos ante una buena historia.

Falta definición en personajes como el malvado Della Pesca, imprescindible en este tipo de films, y el trío canadiense, de los que se debería haber sacado más partido.

El que no sea una película de boxeo también pasa factura, quedándose para mi gusto a medias en todo. La narración de la historia de Carter resta protagonismo al drama carcelario del protagonista. Queda patente que la injusticia esta clara, sustentándose esto en el odio racial de Della Pesca hacia el personaje de Carter.

En general la película se deja ver bastante bien, no se hace pesada y fluye visualmente ante el espectador que empatiza rápidamente con los personajes, hasta con el malvado capitán de los guardias la prisión de Shawshank de "Cadena Perpetua", que aquí es pura bondad y amabilidad; esto es lo que menos me ha gustado.