Título 21º de la serie oficial de James Bond, realizado por Martin Campbell. Se basa en la novela "Casino Royale" (1953), la primera de Ian Fleming sobre Bond. Se rodó en Praga, Venecia, Lago Como (Italia) y Bahamas y en los Barradov Studios (Praga) y Pinewood Studios (Londres), con un presupuesto de 130 M dólares. Producido por Michael G. Wilson y Barbara Broccoli, se estrenó en "première" el 14-XI-2006 (Londres).

La acción tiene lugar en Praga, Mbale (Uganda), Madagascar, Bahamas, Miami, Montenegro e Italia, en 2005/06, a lo largo de 2 meses (junio y julio). Tras conseguir la promoción a agente doble cero, James Bond (Daniel Craig) recibe de M (Judi Dench) la orden de localizar al malvado Le Chiffre (Mads Mikkelsen), financiador de operaciones terroristas, e impedir sus actividades. Le asigna como apoyo ténico a Vesper Lynd (Eva Green).

La película es una obra de acción, con elementos de aventura, suspense, misterio y thriller. La figura del protagonista experimenta cambios respecto de films anteriores. Craig es un agente duro, frío y cruel, que sufre, sangra, suda, desobedece y se enamora, y que se comporta como un atleta fornido, de gran resistencia e insólita astucia. Se aleja de la elegancia sardónica de Moore y del encanto conquistador de Connery. Sus patrones antiguos se han adaptado a los nuevos héroes de acción, como Bourne. No faltan lances de humor de doble sentido, gestos cómicos y hechos hilarantes (Bond en smoking). Pese a ello, el film se desarrolla en un tono general serio, lo que justifica el semblante hosco y, en ocasiones, agresivo y melancólico del actor. La acción, bien rodada y montada con habilidad, alcanza niveles de gran fuerza, que invitan a olvidar los elementos de inverosimilitud que contiene (suspensiones flagrantes de la ley de gravedad y similares). También por ello, las principales secuencias de acción (persecuciones en Miami y Madagascar y episodio de Venecia) no se hacen largas, pese a su duración. La versatilidad y agilidad de la cámara confieren a la obra una visualidad eficiente y efectiva, con secuencias prolongadas de planos muy brves y muy diferentes en posición, perspectiva, proximidad y movimiento. Los giros retienen la atención, pese a que en ocasiones su número se multiplica en demasía. La obra aporta elementos significativos que permiten explicar el carácter misantrópico, mujeriego e interiormente atormentado de Bond de las novelas posteriores de Fleming.

La música combina composiciones sinfónicas y solos de piano sobre variaciones del tema principal. El tema romántico "Vesper" está dedicado a la memoria de John Barry, cuyo estilo emula. La fotografía es clara, colorista, luminosa e ingeniosa, hace uso de variadas harmonías de color y traza un dibujo esmerado. La estética visual incluye elementos sucios (manchas, sudoraciones), estremecedores (ojo sangrante), sádicos (bateador de alfombras) y tenebrosos (sala de castigo). El guión, sucinto y claro, apoya una pieza de buen entretenimiento.