Básicamente es una película con una historia demasiado fantasiosa, por lo que generalmente se las encasilla dentro del género infantil. Desde el momento en que nuestro protagonista principal entra en la aventura, se suceden unos a otros los recursos más comunes para un guión pueril: situaciones harto extravagantes, la idea del héroe de la galaxia que salva a los inocentes de las manos del perverso enemigo, la chica que enamorada de nuestro galancito de turno espera que su príncipe azul regrese victorioso de batalla, villanos y defensores de la justicia trenzados en batallas, narración estilo video juegos, final tipo Hollywood previsible. No puedo decir que es una cinta mala, pero hay que tener varios recaudos a la hora de sentarse y mirarla. La mayoría de ellos se pueden obviar si uno tolera y se auto convence que está a punto de mirar una película infantil con personajes muy simples y con las ideas fundamentales concretas. Lo demás es positivo, me encontré con buenos efectos visuales para una cinta de 1984, con alternancia de los típicos disfraces de vestuarios para dar vida a los personajes intergalácticos, muy buena música de fondo que bien acompaña las distintas variantes que el filme propone: angustia, vértigo, osadía, entusiasmo, y mucha aventura. Especial para ver en familia un domingo a la tarde, comer muchos pochoclos y pensar muy, pero muy poco.