No hay dudas de que Jim Gillespie incurre en muchos tópicos ya viciados dentro del género de terror sobrenatural con adolescentes como protagonistas.

También es obvio que el fundamento que sostiene el conflicto del filme está pensado a las apuradas, justo como para servir de excusa para mostrar una cinta violenta y muy dinámica en su ritmo narrativo.

Aunque también hay que tener en cuenta que este tipo de cine busca ser efectista y darle al espectador emociones fuertes, muchas veces sin tener en cuenta la verosimilitud de lo expuesto en pantalla. No nos olvidemos de que se trata de cine de terror con temática fantasiosa, por tanto hay que aceptar las licencias que los cineastas propongan, siempre y cuando no superen los límites soportables y se caiga en el absurdo.

Los ingredientes para este filme: un pueblo perdido en medio de la nada con espesos pantanos, un poco de vudú que se sale de control dando vida a un monstruo sobrenatural, un puñado de adolescentes a los cuales cazar, y mucha sangre.

Esta película a grandes rasgos bebe de una pequeña gran obra como es “Jeepers Creepers”, sobre todo porque los personajes son adolescentes que van huyendo de un monstruo sobrenatural que les quiere dar caza. Además la cinta plantea su acción en distintos escenarios, pues el conflicto se va trasladando de un lugar a otro. Eso hace que el filme nunca pierda ritmo ni dé tiempo para aburrir al espectador.

Lo mejor de este obra de terror son sus locaciones fílmicas. Los escenarios naturales pantanosos propios del sur de Louisiana constituyen un marco sugerente para ser el telón de fondo de la historia. La acción se despliega en un pequeñísimo pueblo donde sólo existen algunas antiguas casas y muchos pantanos con densa vegetación.

También se nota que Jim Gillespie se preocupa para que su obra sea llamativa en lo estético. Para ello siempre busca conseguir tomas desde sugestivos ángulos de filmación, además de lograr algunas secuencias impactantes por lo truculentas que resultan.

Los efectos especiales sí que pueden resultar un tanto cutres, pero hay que siempre analizarlos teniendo en cuenta el presupuesto de esta modesta cinta de terror. Por tanto no creo que sea un aspecto negativo si no perdemos de vista que los mismos son dignos para una oferta de serie B.

Las actuaciones son resultonas y efectistas, nada para reprochar si las analizamos de acuerdo a las exigencias que demanda un guión que busca sólo entretenimiento a base de sangrientos sobresaltos.

Y ya que hablamos de la violencia que aparece en el relato, hay que decir que esta cinta es bastante bestial en sus situaciones. Y lo que es mejor aún, no hay concesiones ni privilegios con ningún tipo de personaje, sean “buenos” o “malos” en su esencia. Eso es un elemento para agradecer, porque por allí no es común en este tipo de productos.

Saco conclusiones en spoiler por falta de lugar