Sobre todo hay que apuntar que es una película sumamente cutre. Los efectos son baratijas y parece un documental. Mezcla películas clásicas como "Al final de la escalera" y "Terror en Amytville", con por supuesto la gran imitación del terror de "La bruja de Blair". Una casa encantada, supuestamente basada en la realidad, donde un grupo con cámaras y radios se ponen a investigar. Ya se pueden imaginar lo que sucede en la casa y en la hora y media que dura esto. No es imposible de ver pero es facilmente olvidable y de lo muy visto. Los actores no lo hacen mal y alguna escena con fantasmas es lograda, pero nunca te la llegas a creer.