Parece mentira que pasen y sigan pasando los años y sin embargo desde la nación con mayor poder cinematográfico del mundo, sigan apostando por hacer películas de este estilo, en el que una única persona, con ayuda de sí misma, y en todo caso con la pequeña colaboración de algunos personajes secundarios debe de enfrentarse a todo un ejército. ¿Desigual? Mira tu por donde que en Hollywood no, es más, si alguien tiene ventaja es en todo caso Mark Wahlberg que el muy abusador no tiene piedad de nada ni de nadie, con una puntería de diez y unos recursos físicos y mentales a prueba de cualquier cosa que, por grande que sea, se le pudiera poner por delante.

Ciertamente, para haberle puesto un seis la estoy criticando demasiado, es verdad, pero es que lo dicho en el primer párrafo fue la sensación que se me quedó tras ver la película, mientras que durante el transcurso de la misma, he de decir que no tenía intención ninguna de sentarme a verla, pero tras un comienzo muy prometedor y una sucesión de acontecimientos que invitaban a coger una bolsa de roscas (palomitas) y no levantarme hasta el "pitido final", la película empezó a decaer, y con ello mi interés, tanto fue así que fue aquella que ya expuse terminó por ser mi sentir general. Sin embargo, al César lo que es del César, al principio te atrapa y luego te va soltando poco a poco y finalmente te acabas cayendo por el precipicio.

Me parece acertado decir, como ya han dicho por ahí, que en función de tu exigencia con respecto este tipo de películas te gustará más o menos, pero no esperes algo que se sobre salga en exceso de una típica película del bueno de Schwarzenegger y similares.