Inicialmente, George Lucas no tenía pensado hacer de Star Wars una franquicia, ni una serie de películas ni nada por el estilo, pero el Lado Oscuro de la Fuerza (o de los billetes) hizo que cambiara de idea. Así, el culebrón galáctico que Lucas inició con el Episodio IV tiene su continuación en este Episodio V, donde la saga continúa con mucho más vigor, más ritmo y más emoción que su notable predecesora.

"El imperio contraataca" es más que una continuación. Es la película clave de toda la saga, quizás la más importante en cuanto a contenido, elementos definitorios y desarrollo de personajes. Han Solo y la princesa Leia mantienen un romántico tira y afloja, Luke Skywalker ahonda en los misterios de la Fuerza gracias a la instrucción de Yoda, y Darth Vader deja entrever que tuvo un pasado difícil y con una vida que no siempre fue tan oscura.

El comienzo del filme ya dicta las pautas del espectáculo que es toda la película en sí, con el ataque imperial a la base rebelde en el planeta helado de Hoth. Se hace un uso asombroso de la técnica stop-motion para los gigantescos andadores imperiales, auténtica carnaza de "merchandising" y todo un icono de la serie. A la batalla le sucede la huída de Luke hacia el planeta Dagobah, donde hace su primera aparición Yoda, quizás el personaje más famoso del universo Star Wars, mientras que el Halcón Milenario de Han Solo huye de la implacable persecución imperial. Todos confluyen al final en el mismo lugar, el planeta Bespin, donde Luke recibe de Darth Vader una sorprendente revelación cuya frase, con la voz de James Earl Jones en el original y de nuestro Constantino Romero en el doblaje español, es la más famosa de la historia del cine.

La épica de la narración y la mezcla entre ciencia-ficción y aventura "medieval-fantasy" que ya hacía gala el Episodio IV, alcanza aquí cotas inalcanzables en ninguna otra entrega de la serie. "El imperio contraataca" supone la aventura definitiva, la consagración dentro de los grandes del cine. Es la apoteosis de la space-opera y, más concretamente, de la ciencia-ficción.

Más que recomendable.