Irreversible

La película no vale gran cosa pero reabre el eterno debate sobre qué puede considerarse arte y qué no. Por ejemplo, ¿son los animales mutilados de Damien Hirsch una manifestación artística? ¿Es lícito que el arte, que debiera ser vehículo de aquello que nos eleva por encima de nuestra condición de animales, busque la repugnancia, el aburrimiento, lo revulsivo, lo deliberadamente desagradable?
"Irreversible" constituye una anécdota fílmica demasiado larga rodada con el aparente objetivo de remover las tripas al espectador y pedirle un posicionamiento moral, artístico y humano. Una provocación, pues, que nos lanzan con la ayuda del virulento Cassel y de la bellamente inexpresiva Bellucci; como los animales mutilados de Hirsch, no dejan indiferente, pero resulta más interesante discutir sobre ellos que verlos.

Es necesario ver una película que ofende, irríta y perturba como Irreversible? Pués yo digo que sí, que no sólo es necesario sino que también es imprescindible. Estos son los films por los cuàles debemos dar las gracias que a la industria norteamericana no les interese , o mejor aún, los ignoren, porque acá nada es color de rosa ni el amor no pide perdón. Acà hay actos atroces, de los peores que el ser humano es capáz de cometer, y por lo tanto esos tremendos actos tendrán sus consecuencias. Y ya ninguno de los protagonistas volverá a ser el mísmo, nunca jamás. Por que así sucede en la vida misma, dentro de cada uno de nosotros vive la víctima y el victimario, y de verdad conmueve que Gaspar Noé tenga las tremendas agallas de mostrarlo a pelo, así , sin medias tintas ni sutilezas. Sí, hay mucha, muchísima violencia, violaciones y todos los golpes bajos que se nos ocurran. Y sí que duele y pone los pelos de punta que se muestre todo eso, y mucho más sin el menor respeto a la sensibilidad ni el decoro. Por eso yo creo que sí, que és necesario verla , porque el dolor también forma parte de la vida.

Siempre resulta mejor mirar hacia otro lado y creernos que todo es maravilloso. Así, de camino, nosotros mismos pensamos que somos estupendos.
Me ha gustado a pesar de su violencia. No entiendo que alguien al que le guste el género bélico, de acción en general, pueda decir que es violenta esta película. LA REALIDAD NOS ASUSTA.
Tiene un mensaje: Hay que respetar a los demás. Siempre hay consecuencias.
Buen guión y con ritmo. Buena interpretación.
La secuencia de la violación pone los vellos de punta. Es la que yo he podido ver más detallada y más explícita en toda mi vida.
Pero que ocurre. Uno puede ver en familia la saga entera de Rambo y no pasa nada. Pero si vemos algo que además de violencia con derramamiento de sangre y visceras, con el añadido de una ideología fascistoide como es el ejemplo de Rambo, le sumamos el ingrediente vedado, que es el SEXO, algo tabú, y más en este tipo de agresiones tan humillantes, pasa a ser algo peligroso o dañino para nuestra conciencia social e individual.
SABEMOS QUE EXISTE, PERO ES MEJOR MIRAR HACIA OTRO LADO.
¡Niños, a la cama!

Intentaré ser más breve que en mi primer intento de criticarla. La película es indignante, porque es vacía de cualquier contenido y te hace quedar tras su finalización con cara de bobo por haber tirado una hora y media de tu vida a la basura.

No cuenta nada, no aporta nada, no hace nada original. Trata de decir, si acaso, que toda acción tiene su consecuencia y que si fueramos con un poco más de cuidado en la vida, evitaríamos las peores consecuencias... pero como somos seres humanos, actuamos sin que nos importen las posibles consecuencias. Vale... ¿quién no conoce eso de la acción-reacción o de la causa-efecto? ¿Pretende abrir un debate sobre si el futuro está escrito o no? Puede que lo pretenda, pero ni eso.

La peli es en plan "Memento", sólo que la historia se desvela a la cuarta o quinta escena de la peli (que serían las últimas de la historia en el tiempo). El resto trata de desvelar determinados vínculos entre los protagonistas, o bien mostrarnos las causas que han originado el efecto. Pero sin ningún éxtio.

Aparte, las escenitas son horribles. La conversación del metro es tan absurda e irreal como irritante. Además no aporta absolutamente nada a la trama (ya desaparecida a esa altura del film). Lo de la violación no hay quien se lo crea (en el paso subterraneo de una calle céntrica a una hora que se ve gente por la calle, durante más de diez minutos no pasa ni Cliford por allí)... sólo se trataba de cuidar un poco los detalles. Porque parece que lo único que se "cuida" es el incesante movimiento mareante de la cámara para aquí y para allá. Y es que cuando digo mareante, es porque marea, porque hay veces que tienes que dar a la pausa o dejar de mirar la tele. Pueden pensar que es que aporta algo a la película, que tiene algún significado... nada de nada, a mí entender sólo querían ir de originales y se lucieron. Además la peli debería hacer algún tipo de advertencia antes de visionarla a los especatodres, pues hay momentos que pueden desencadenar un ataque epilético (sin exagerar, y si no atento al final de la película, el flasheado ese sin sentido tras haber estad girando la cámara desde el cielo sobre un punto fijo, también sin sentido)

¿Y que pinta la persecución a gays y transexuales? Parece una barata criminalización a este sector de la población, así porque sí, sin motivo alguno. ¿Posible morbo, quizá? Ni idea.

Eso sí, la Bellucci sale desnuda... debe de ser el gran atractivo del film. Y que no me digan que el atractivo del film es "lo impactante que resulta" o "lo violenta que llega a ser", porque ni una cosa ni otra. Será porque no hay películas que tengan esos efectos de manera más que correcta...

No la vean. Sobre todo si son epilépticos o propensos a padecer ataques.

No sé cómo se escribe la onomatopeya del vómito. De saberlo esta crítica apenas se extendería más allá de una simple frase.
Irreversible es, muy probablemente, una de las películas más irritantes, aburridas, deprimentes, asquerosas, inmorales, repulsivas, deleznables, obscenas, repugnantes, absurdas, vomitivas, pretenciosas, misóginas, sensacionalistas, vacías, homófobas, infracinematográficas y abyectas que he tenido la desgracia de contemplar en mi, por ahora, joven vida. Como siga viendo cosas como esta desde luego envejeceré y me moriré muy pronto, aunque solo sea para dejar de sufrir.