Misión: Imposible - Nación secreta
2015 

6,3
25.203
Acción. Thriller
Con la FMI disuelta y Ethan Hunt (Tom Cruise) abandonado a su suerte, el equipo tiene que enfrentarse contra el Sindicato, una red de agentes especiales altamente preparados y entrenados. Estos grupos están empeñados en crear un nuevo orden mundial mediante una serie de ataques terroristas cada vez más graves. Ethan reúne a su equipo y une sus fuerzas con la agente británica renegada Ilsa Faust (Rebecca Ferguson), quien puede que sea o ... [+]
23 de enero de 2022
23 de enero de 2022
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He vuelto a ver... Misión Imposible: Nación Secreta (Netflix)...
https://www.filmaffinity.com/es/film981330.html
Un 6. Quinta entrega de la saga. Y vuelve a ser un poco más de lo mismo.
Es entretenida, tiene acción y tensión, pero guión flojo, así que, aunque es entretenida no diría que es buena. Pero sirve para pasar un rato entretenido con acción.
Si te gusta la acción, y sobre todo, si ya has visto otras anteriores de la saga y te han gustado, esta también te gustará. Y si no te han gustado, esta es más de lo mismo. No esperes resultados diferentes ante mismas cosas. No es imposible, pero sí improbable.
https://www.filmaffinity.com/es/film981330.html
Un 6. Quinta entrega de la saga. Y vuelve a ser un poco más de lo mismo.
Es entretenida, tiene acción y tensión, pero guión flojo, así que, aunque es entretenida no diría que es buena. Pero sirve para pasar un rato entretenido con acción.
Si te gusta la acción, y sobre todo, si ya has visto otras anteriores de la saga y te han gustado, esta también te gustará. Y si no te han gustado, esta es más de lo mismo. No esperes resultados diferentes ante mismas cosas. No es imposible, pero sí improbable.
10 de julio de 2023
10 de julio de 2023
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Como no podía ser de otra forma, una vez más, Ethan Hunt (Tom Cruise) se enfrenta a un terrible mal que acecha al planeta, sin embargo, la organización conocida como “El sindicato” es el rival con más poder e influencia a lo largo de la saga. Nuevamente tendrá que trabajar únicamente al lado de su equipo porque la FMI ha terminado disuelta debido a que sus formas no le agradan a Hunley (Alec Baldwin) el director de la CIA.
En este caso Hunt intenta dar con los fundadores y responsables de la creación del sindicato, organismo que como un gran titiritero mueve sus hilos en varias partes del mundo para generar algún caos para cambiar (o mantener según sea el caso) un orden establecido, para esto se pone detrás de un personaje que luego se conocerá como Lane (Sean Harris), un despiadado que está en busca de una información trascendental para la organización.
De esta forma y también como es costumbre, se realiza un tour mundial por un sinnúmero de locaciones alrededor del mundo: Bielorrusia, Marruecos, Londres, París, La Habana, Viena, en un juego de cacería formidable donde el personaje de la agente Ilsa Faust (Rebecca Ferguson) resulta trascendental en un ida y vuelta como personaje “bueno” o “malo”, mientras Hunt logra concretar su equipo con los ya conocidos Benji (Simon Pegg), Brandt (Jeremy Renner) y Luther (Ving Rhames).
Para este filme el equipo de producción contrata como director a Christopher McQuarrie, un realizador que ha construido un tándem interesante con Tom Cruise que sin duda en esta saga a alcanzado su cota más alta, siendo también realizador de los siguientes largometrajes. Lo que diferencia a McQuarrie de los demás realizadores es que él realiza en solitario el guion del filme, ¿acaso se trata de cine de autor?
Es cierto que J.J. Abrams hizo algo similar en la tercera película, pero lo hizo en conjunto con Alex Kurtzman y Roberto Orci, por tanto, es diferente a lo que hace McQuarrie acá, que por cierto, incluso hay que considerarlo antes guionista que director, por supuesto no se puede dejar de lado la participación de Drew Pearce como gestante de la historia que se desarrolla en esta secuela.
Rogue Nation se pone mano a mano con la primera película como las mejores de la saga (a la espera de ver las posteriores), realmente la historia y el guion están muy bien hechos, hay un villano digno con una actuación sobresaliente de Harris, buenos giros en la trama y sobre todo, mucho espionaje y muy bien manejado al igual que los momentos de tensión, más las acostumbradas y extremas secuencias de acción propias de la saga.
En este caso Hunt intenta dar con los fundadores y responsables de la creación del sindicato, organismo que como un gran titiritero mueve sus hilos en varias partes del mundo para generar algún caos para cambiar (o mantener según sea el caso) un orden establecido, para esto se pone detrás de un personaje que luego se conocerá como Lane (Sean Harris), un despiadado que está en busca de una información trascendental para la organización.
De esta forma y también como es costumbre, se realiza un tour mundial por un sinnúmero de locaciones alrededor del mundo: Bielorrusia, Marruecos, Londres, París, La Habana, Viena, en un juego de cacería formidable donde el personaje de la agente Ilsa Faust (Rebecca Ferguson) resulta trascendental en un ida y vuelta como personaje “bueno” o “malo”, mientras Hunt logra concretar su equipo con los ya conocidos Benji (Simon Pegg), Brandt (Jeremy Renner) y Luther (Ving Rhames).
Para este filme el equipo de producción contrata como director a Christopher McQuarrie, un realizador que ha construido un tándem interesante con Tom Cruise que sin duda en esta saga a alcanzado su cota más alta, siendo también realizador de los siguientes largometrajes. Lo que diferencia a McQuarrie de los demás realizadores es que él realiza en solitario el guion del filme, ¿acaso se trata de cine de autor?
Es cierto que J.J. Abrams hizo algo similar en la tercera película, pero lo hizo en conjunto con Alex Kurtzman y Roberto Orci, por tanto, es diferente a lo que hace McQuarrie acá, que por cierto, incluso hay que considerarlo antes guionista que director, por supuesto no se puede dejar de lado la participación de Drew Pearce como gestante de la historia que se desarrolla en esta secuela.
Rogue Nation se pone mano a mano con la primera película como las mejores de la saga (a la espera de ver las posteriores), realmente la historia y el guion están muy bien hechos, hay un villano digno con una actuación sobresaliente de Harris, buenos giros en la trama y sobre todo, mucho espionaje y muy bien manejado al igual que los momentos de tensión, más las acostumbradas y extremas secuencias de acción propias de la saga.
9 de noviembre de 2023
9 de noviembre de 2023
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Quinta película de esta saga, la cual permite lucirse a un magnífico Tom Cruise.
La película es un poco más de lo mismo y ahora que estoy viendo toda la saga seguida, no me sorprende, mucha acción, damisela que le ayuda en la misión con la que tiene feeling, escenas imposibles, (aunque muchas escenas son muy buenas y originales) grandes persecuciones con todo tipo de vehículos... pero la peli es verdad que entretiene, divierte y sobretodo no aburre, perfecta para pasar un rato ameno y reconozco que si hubiese visto solo esta, sin ver la saga seguida, la hubiese dado más nota.
La película es un poco más de lo mismo y ahora que estoy viendo toda la saga seguida, no me sorprende, mucha acción, damisela que le ayuda en la misión con la que tiene feeling, escenas imposibles, (aunque muchas escenas son muy buenas y originales) grandes persecuciones con todo tipo de vehículos... pero la peli es verdad que entretiene, divierte y sobretodo no aburre, perfecta para pasar un rato ameno y reconozco que si hubiese visto solo esta, sin ver la saga seguida, la hubiese dado más nota.
12 de junio de 2024
12 de junio de 2024
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Después de la espectacular cuarta entrega, “Protocolo fantasma” (2011), se sustituye a Brad Bird por Christopher McQuarrie, un especialista en vistosos thrillers de acción que ya trabajó con Cruise en varias ocasiones, ya sea dirigiendo (“Jack Reacher”, 2012) o guionizando (“Al filo del mañana”, 2014), y será un fijo para las siguientes entregas de la saga. En “Nación secreta”, McQuarrie continua con el molde impuesto por J.J.Abrams con la magnífica tercera entrega, molde que ha resultado ser tan rentable como atractivo para el público: ver una película de “Misión Imposible” es siempre garantía de entretenimiento.
El filme arranca con fuerza y mantiene el nivel esperado, si bien es cierto que parece arriesgar menos que en anteriores entregas y se limita a contar un relato de espionaje sin muchas novedades y bastante predictivo. Espías desconfiados, nadie es quien parece, pero resulta que luego sí, pero luego tampoco… todo muy visto ya, pero McQuarrie sabe cómo mantener el interés y nos brinda unas espectaculares escenas de acción, destacando las de la zambullida a pulmón libre y las persecuciones en moto por las calles de Marruecos. No falta tampoco el imprescindible sprint que se marca Tom Cruise en todas las entregas, esta vez por el corazón de Londres.
También es un clásico ver a Cruise jugarse la vida en las escenas más peligrosas sin contar con ningún doble. En esta ocasión no duda en engancharse al fuselaje de un avión, como podemos ver nada más comenzar en una escena que podría resumir muy bien todo el leit motiv de la saga: imposible. Toda una declaración de intenciones.
El filme arranca con fuerza y mantiene el nivel esperado, si bien es cierto que parece arriesgar menos que en anteriores entregas y se limita a contar un relato de espionaje sin muchas novedades y bastante predictivo. Espías desconfiados, nadie es quien parece, pero resulta que luego sí, pero luego tampoco… todo muy visto ya, pero McQuarrie sabe cómo mantener el interés y nos brinda unas espectaculares escenas de acción, destacando las de la zambullida a pulmón libre y las persecuciones en moto por las calles de Marruecos. No falta tampoco el imprescindible sprint que se marca Tom Cruise en todas las entregas, esta vez por el corazón de Londres.
También es un clásico ver a Cruise jugarse la vida en las escenas más peligrosas sin contar con ningún doble. En esta ocasión no duda en engancharse al fuselaje de un avión, como podemos ver nada más comenzar en una escena que podría resumir muy bien todo el leit motiv de la saga: imposible. Toda una declaración de intenciones.
18 de mayo de 2025
18 de mayo de 2025
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‘Misión Imposible’ no solo abraza definitivamente el estilo Bond en esta entrega, la más «bondiana» de todas, sino que lo hace mejor que la propia franquicia británica, o como mínimo mejor que la etapa con la que rivalizaba en el tiempo (la de Craig, al que Cruise se come con patatas en todos los aspectos).
Lo tenemos todo. El agente elegante metido en todo tipo de fregados, que van desde imposibles y espectaculares secuencias de acción a las más clásicas misiones de infiltración, que además aún tiene tiempo para ir por ahí soltando feromonas y conquistar a cualquier pibón con una simple mirada juguetona. O eso se cree él, porque en el juego de la seducción la corona reside en la espía misteriosa, de lealtades inciertas, que lo mismo te pide que te fugues con ella que te arroja a los lobos; una espía por la que vivir y morir. Tremenda la sensualidad de Rebecca Ferguson y su juego con Tom Cruise, además ambos se retroalimentan con sus expresiones y la cámara los ama. No faltan los gadgets que resuelven cualquier situación complicada o las armas ocultas en instrumentos cotidianos. Por supuesto, está el malo que destila frialdad, con un malévolo plan que amenaza con poner patas arriba al mundo entero. Incluso tenemos a nuestra propia organización secreta de asesinos y contraespionaje, el Sindicato, primos de Spectra. Hasta la banda sonora de la serie evoluciona hasta parecerse a la del agente 007. En serio, no falta nada.
Sin quitar mérito a los directores anteriores, Christopher McQuarrie es lo mejor que le ha pasado a la saga. Ha recogido el cuerpo resucitado que dejó Brad Bird y le ha sacado brillo. Es, claramente, uno de esos niños que siempre soñó con ser espía de cine, algo palpable en cada plano. Su dirección es intachable, la película tiene un ritmo incesante, intriga constante, un guion repleto de sorpresas, un gran sentido del humor y una ambientación muy variada, exótica.
Tom Cruise realmente se cuelga del avión y realmente aguanta la respiración 3 minutos en la secuencia submarina (una escena que fue rodada en una toma, aunque en la película no lo parezca porque hay varios cortes para transmitir dinamismo). Ambas son escenas que humillan a la mayoría de películas de acción comerciales, tan abonadas al engaño, aunque si tengo que elegir, yo me quedo con la de la ópera: esa tensión asesina vestida de etiqueta es justamente por lo que estoy aquí. Qué puedo decir, yo también soñaba con ser un espía de cine.
Lo tenemos todo. El agente elegante metido en todo tipo de fregados, que van desde imposibles y espectaculares secuencias de acción a las más clásicas misiones de infiltración, que además aún tiene tiempo para ir por ahí soltando feromonas y conquistar a cualquier pibón con una simple mirada juguetona. O eso se cree él, porque en el juego de la seducción la corona reside en la espía misteriosa, de lealtades inciertas, que lo mismo te pide que te fugues con ella que te arroja a los lobos; una espía por la que vivir y morir. Tremenda la sensualidad de Rebecca Ferguson y su juego con Tom Cruise, además ambos se retroalimentan con sus expresiones y la cámara los ama. No faltan los gadgets que resuelven cualquier situación complicada o las armas ocultas en instrumentos cotidianos. Por supuesto, está el malo que destila frialdad, con un malévolo plan que amenaza con poner patas arriba al mundo entero. Incluso tenemos a nuestra propia organización secreta de asesinos y contraespionaje, el Sindicato, primos de Spectra. Hasta la banda sonora de la serie evoluciona hasta parecerse a la del agente 007. En serio, no falta nada.
Sin quitar mérito a los directores anteriores, Christopher McQuarrie es lo mejor que le ha pasado a la saga. Ha recogido el cuerpo resucitado que dejó Brad Bird y le ha sacado brillo. Es, claramente, uno de esos niños que siempre soñó con ser espía de cine, algo palpable en cada plano. Su dirección es intachable, la película tiene un ritmo incesante, intriga constante, un guion repleto de sorpresas, un gran sentido del humor y una ambientación muy variada, exótica.
Tom Cruise realmente se cuelga del avión y realmente aguanta la respiración 3 minutos en la secuencia submarina (una escena que fue rodada en una toma, aunque en la película no lo parezca porque hay varios cortes para transmitir dinamismo). Ambas son escenas que humillan a la mayoría de películas de acción comerciales, tan abonadas al engaño, aunque si tengo que elegir, yo me quedo con la de la ópera: esa tensión asesina vestida de etiqueta es justamente por lo que estoy aquí. Qué puedo decir, yo también soñaba con ser un espía de cine.
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