Lincoln

Bueno he terminado de ver esta película .Daniel Day Lewis es una de mis actores favoritos, en todas sus películas sobresale su actuación, en esta también, interpreta a Lincoln perfectamente. También está muy lograda la caracterización. Pero siendo una película de Spielberg, esperaba la verdad algo más. Me ha parecido un verdadero tostón, excesivamente larga, para no contar nada. Otra cosa, es el doblaje, muy mal elegidos los actores de doblaje. A Sally Field la dobla la hija de actor de doblaje Felipe Peña, la actriz Vicky Peña, resulta horrorosa esa voz para Sally Field, así como Jordi Brau para Daniel Day Lewis. Un rollo de película y un horror el casting del doblaje. Sólo puedo decir que no me ha gustado nada.

Pretensiones:
En su momento cuando lanzaron el primer trailer y llegaron las buenas críticas de la cinta y nominaciones a premios me entraron muchas ganas de verla pero muchos comentarios escuché acerca del ritmo y duración de la cinta de que si era aburrida y al final le cogí bastante miedo a verla debido a que el director de la cinta es de mis favoritos y tenía miedo a aburrirme siendo fan pero finalmente me he aburrido aunque reconozco que la cinta tiene grandes momentos que no merecen suspenderla aunque me haya decepcionado y la considere la peor de Spielberg.
Puntos positivos:
Para que engañarnos, desde el guión, los dialogos y las actuaciones están brillantes, la fotografía con tintes oscuros está muy bien en cuanto a iluminación y la banda sonora de John Williams está soberbia aunque lejana a otras grandes composiciones de él mismo. Day-Lewis se marca un homerun y realiza una interpretación magistral aunque sin lugar a dudas me quedo con el protestón y busca grescas de la cinta Tommy Lee Jones que demuestra que sigue siendo un gran actor por mucho que algunos lo tachen de acabado. El reparto muy correcto y las escenas en los juzgados muy bien con sus momentos de tensión a la hora de elegir el voto. La puesta en escena está muy currada con una gran dirección artística y con razón se llevó el oscar en ese apartado.
Puntos negativos:
Ahora es cuando empieza mi lado subjetivo de la película. Para qué engañarnos, me he aburrido en muchos momentos de la cinta y eso una película no lo puede permitir con un espectador. Está claro que el ritmo es muy subjetivo ya que hay gente que se aburre y hay gente que no. Yo no entiendo mucho del tema de la política y quizás sea porque no es mi estilo pero había momentos en que no sabía de que estaban hablando y contaba historias el señor Lincoln que no sé ni para que lo contaban además de no mostrar una escena clave al final de la película que podría haberle dado el enfoque emotivo adecuado para el tono de la cinta. Sus 135 minutos se me hicieron un poco eternos.
Resolución final:
Una pasable película que por mucho que haya conseguido dos oscar que están bien ganados justamente no me llegó la película a ilusionar, no me emocionó y por supuesto me aburrí en varios trozos de la cinta. No es la peor artísticamente hablando de Spielberg pero sí es la que más me ha aburrido y decepcionado de su filmografía, espero que remonte el vuelo y nos traiga Robopocalypse cuanto antes para quitarme esta espinita clavada.

La sinceridad a la que me refiero es la de mi crítica. Sinceramente me ha parecido larga y aburrida.
Con esto no quiero decir que sea mala, fea (estéticamente hablando), con malas interpretaciones...
De hecho es todo lo contrario a eso. Tiene una fotografía preciosa y unas interpretaciones que más de una vez te sacarán una sonrisa de tus labios.
Daniel Day Lewis está TREMENDO. Lincoln siempre me pareció el presidente más importante de los Estados Unidos sólo por el simple hecho de apoyar a los negros. Ole sus narices! Y de hecho, de eso trata esta película. Pero mi pregunta es, ¿realmente hacía falta esta película? Yo creo que no.
Que simplemente es para sacar Oscars interpretativos. Y se nota desde el principio cuales son sus intenciones.
Con sus 2 horas y media de "bla bla bla" (porque es una película de diálogos más que de acciones), el espectador se encuentra entre la vida y el sueño, luchando contra sí mismo para no caer el los brazos de Morfeo.
Quiero hacer especial mención a la interpretación de Day Lewis, que da forma a un Lincoln con el que te irías de copas sin dudarlo.
Esta simplemente es mi opinión. Quien de verdad tiene que juzgar eres tu mismo.

En 1985 SPIELBERG rodó, para sorpresa de todos, un filme intimista y con una carga dramática desconocida en su carrera: EL COLOR PÚRPURA. Ésta historia nos relataba la dura vida de una adolescente negra, a principios del siglo XX; una historia cargada de dolor y humillación. A SPIELBERG le valió 11 nominaciones (aunque su cinta fue barrida en estatuillas por MEMORIAS DE ÁFRICA), y a WHOOPI GOLDBERG un inicio de carrera muy prometedor (ese año su papelón le valió el globo de oro), y digo inicio porque después de esto, WHOOPI se dedicó a buscar fantasmas y contar chistes en los shows catódicos americanos. Doce años más tarde SPIELBERG se embarcó en el navío AMISTAD (1997), para presentarnos una película que denunciaba el tráfico de esclavos desde el viejo mundo al nuevo, y defender los derechos humanos en uno de sus largometrajes más irregular, criticado, y menos comprendido.
Con LINCOLN se quita la china del zapato y vuelve a echar una mirada al tortuoso camino del reconocimiento de la igualdad de derechos de los afroamericanos frente a los blancos en Estados Unidos. Ésta vez el episodio que el director elige es la igualdad de derechos frente a la ley, coincidiendo con los últimos coletazos de la guerra civil americana. Se quita la china del zapato porque LINCOLN es un filme maduro, en el que SPIELBERG se recrea, se rodea de actores de primerísima línea, un diseño de producción cuidado al detalle, y firma un proyecto personal al que llevaba dando forma ya unos cuantos años.

Para narrar este histórico capítulo de la historia americana SPIELBERG usa la figura del presidente americano Abraham Lincoln como verdadero motor e impulsor del triunfo de estos derechos, reconocidos en la decimotercera enmienda de su constitución. LINCOLN no es un biopic, no es la vida del presidente, es la lucha de un hombre por alcanzar un objetivo justo, humano, y también cristiano. LINCOLN sólo recoge éste momento puntual en su trayectoria vital ensalzando la rectitud, el tesón, la humanidad, y la fuerza moral de éste presidente americano.

DANIEL DAY LEWIS ofrece una interpretación, como es habitual en él, de las que ya no se ven, Su mimetismo con el personaje deberían estudiarlo en cualquier escuela de actores que se precie. Su compañera de reparto, SALLY FIELD, está a la altura y nos brinda otra interpretación de escuela, que la señora tiene ya dos Oscars, así que no es moco de pavo… En cuanto a TOMMY LEE JONES, del que no soy muy fan por motivos que no voy a explicar ahora, pues sorprende gratamente, y entiendo que esto de que te dirija SPIELBERG debe motivar hasta límites insospechados.

El único problema de todo esto, y no por ello pequeño, es que la temática, aunque es universal en el fondo, se presenta de una manera muy local, siendo conveniente que el espectador esté familiarizado con la historia, y también con la política estadounidense. LINCOLN es parte de la historia americana, pero no de la nuestra, el único aliciente es disfrutar del magistral trabajo del reparto. Muy recomendable para todos los que estéis haciendo una tesis sobre la historia de Estados Unidos, y obligatoria para todos los que vayáis a apostar en las obligadas quinielas de los Oscar, para el resto es posible que la película se os haga un poco pesada.

LO MEJOR:
DANIEL DAY LEWIS y SALLY FIELD
LA PUESTA EN ESCENA y el saber hacer de SPIELBERG.

LO PEOR:
SU TEMÁTICA interesará poco a mucha gente.
SU DURACIÓN: 150 minutos son muchos para un filme tan estático.

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Tras muchos años de intentos frustrados por llevar la vida de Lincoln a la gran pantalla, el rey midas de Hollywood hacer su sueño realidad, aunque eso sí, sin Liam Neeson, el actor al que quería desde un principio para el papel. Su lugar ha sido ocupado por Daniel Day Lewis, el actor del 'método' por excelencia, un tipo que hace pocas películas, pero que cuando hace una se vuelca en sus personajes de un modo algo perturbador. Evidentemente, con 'Lincoln' no iba a ser menos. Como en él es costumbre, su interpretación está medida al detalle, sus gestos, su voz, sus andares... En fin, algo monstruoso.

Por su parte, Spielberg ha conseguido hacer un buen retrato de un político carismático (aunque quizá algo endulzado para la ocasión) que sigue siendo el presidente más recordado y querido de los Estados Unidos. El director demuestra que una buena película no tiene que estar reñida con su comercialidad, y por suerte, ésta vez ha pensado más en su 'yo' artístico que en su 'yo' productor. En el fondo, la cinta habla sobre la política y está compuesta por multitud de conversaciones sobre ella, y instantes como el del montaje paralelo en el que vemos lo que pasa en la sala dónde se está votando la enmienda que permitirá la abolición de la esclavitud mientras él espera en su despacho los resultados, son magníficas y son de esas escenas que conectan con todos los públicos, les interese más o les interese menos la historia que les están contando.

Y si antes he hablado de la maravillosa actuación de Daniel Day Lewis, no quiero olvidarme del resto del reparto, en especial una maravillosa Sally Field en el papel de su sufrida esposa o en el de Tommy Lee Jones como otro de los políticos que desean acabar con la plaga de la esclavitud cuanto antes (su escena en casa tras ser aprobada la enmienda es magistral). Tampoco quiero olvidarme de otros secundarios como un burlón James Spader, David Strathairn o Jared Harris, unos actores que cada vez que salen en la pantalla inundan de carisma la misma. Sus puntos más flojos son el poco desarrollo del personaje de Joseph Gordon Levitt, el hijo mayor del presidente en la función, o lo poco que tratan el fin de la guerra civil, un momento cumbre en la historia americana.

Imagino que rodar una cinta sobre política no habrá gustado mucho a su distribuidora, pero imagino que los más de 150 millones de $ que lleva recaudados en su país de origen les habrán hecho cambiar de parecer. Spielberg ha vuelto a demostrar que es único a la hora de contar historias. Larga vida al maestro.

Lo mejor: Daniel Day Lewis y la habilidad de Spielberg para aunar calidad y comercialidad.
Lo peor: Personajes que aportan poco como el del hijo mayor de Lincoln o que mucha gente vaya a dejarla pasar por su poco interés en el personaje.

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