13 exorcismos

Película española de exorcismos, que es el primer largometraje del director responsable de algunos episodios de la serie Jaguar (2021), y que cuenta en su reparto con nombres como María Romanillos (No Mires a los Ojos, 2022), y Ruth Díaz (Tarde Para la Ira, 2016), además de la siempre bienvenida aparición de José Sacristán (La Colmena, 1982), en el papel del sacerdote de turno.

Tras una sesión de espiritismo, Laura Villegas comienza a comportarse de manera extraña. Alarmados por el siniestro comportamiento de su hija y convencidos de que el demonio la ha poseído, sus padres acuden al Padre Olmedo, uno de los 15 exorcistas autorizados por el Vaticano para intervenir en casos de posesiones demoníacas. A partir de ahí una serie de fenómenos extraños comenzarán a envolver a los protagonistas de la historia.(FilmAffinity)

13 Exorcismos no pretende innovar en nada, ofreciendo una historia sacada del manual de películas del subgénero, que sobre mantener al espectador entretenido, se olvidará de la mente de este nada más terminar su visionado. Las actuaciones cumplen, destacando a la joven protagonista/poseída María Romanillos, y José Sacristán parece pasar la película sin quitar el piloto automático, aunque resulta curioso verle en este registro. El ritmo de la película puede resultar algo pausado en segun que momentos, aunque esto no impedirá que aquellos con afinidad por este subgénero tan carente de originalidad disfruten con este carrusel de sustos, unos más efectivos que otros.

Estamos ante una correcta ópera prima, que puede gustar a los fans del cine de género que acudan a verla sin demasiadas expectativas, ya que resulta fácil de ver, aunque se echa de menos en ella algún atisbo de originalidad más allá del dilema moral que plantea.

Nota personal 6/10

Como aspecto negativo fundamental cabe decir que este filme no aporta nada al género de terror sobrenatural o de posesiones o exorcismos. Bajo mi punto de vista, es una película más de exorcismos.

Por otro lado, me parece que todo sucede demasiado rápido desde un primer momento. Las posesiones, existan estas realmente o no, suelen ser procesos más bien lentos, lo que se puede ver en la gran obra de Peter Blatty "The Exorcist", es decir, que no son fenómenos que aparezcan de la noche a la mañana, sino que precisan de un nido y un desarrollo paulatino. En este film todo es embarullado y todos los pasos relacionados con la posesión y demás son excesivamente rápidos y poco detallados.

Como último aspecto negativo diría que todo lo que sucede no es previsible, sino lo siguiente. Es decir, si uno ha visto 3 películas de exorcismos sabe lo que va a suceder en todo momento y el film no le generará demasiada sorpresa. Desde el minuto uno se sabe a quién le van a pasar las cosas y cómo le van a pasar. Y esto decepciona un poco.

Como dos puntos positivos decir que presenta mi ciudad natal, Ourense, de un modo muy digno y se ve cierto cariño en las imágenes y entornos que se emplean. Y por otra parte, el final, del que no voy a desvelar nada, es quizá lo más interesante de la película pues en mí despertó varios espacios de reflexión.

También es reseñable la actuación de Cristina Castaño, la que mejor interpreta su papel de largo.

La verdad es que, viendo que venía firmada por los mismos indeseables que hicieron ‘Malasaña 32’, tenía que haber sospechado que esto no saldría bien. Pero bueno, todo el mundo merece otra oportunidad ¿No? Tanto va el cántaro a la fuente que terminará sonando.

Pero en ’13 exorcismos’ no. Es una película que ni siquiera es capaz de aprovechar la gran baza que tiene: José Sacristán en modo párroco que hace exorcismos. Venga, cuéntame un poco de él sin caer en tópicos, sácate aluna sorpresa de la manga… ¡Algo! Pero no, Jacobo Martínez está tan convencido de que el «suficiente» diseño de producción bastará para convencer al público que tira de obviedades para sacar adelante la película. Ahí donde ‘La Abuela’ triunfaba, ’13 exorcismos’ fracasa. Pero no una, sino otra y otra vez…

Aburrida, predecible y, lo peor de todo: no da miedo.

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Algo huele a podrido en la cinematografía española. Claro ejemplo de que hay algo que no cuadra. Tal bodrio, tal esperpento y despropósito no está justificado. No todo vale.

Desconozco si ésta película ha sido subvencionada (única explicación) de modo contrario alguien pierde dinero seguro. Guion mil veces visto y manido, puesta en escena patética y un José Sacristán que aparece sin ganas (y no es de extrañar).

Nada de miedo, nada de drama, pero mucho de aburrimiento para la enésima película que se sube al carro de lo paranormal.

No tiene nada de exorcismo salvo las escenas finales. De lo único que os librara es de un par de horas de vuestra vida. No se salva nada, sonido muy mejorable y técnicamente llena de fallos.

Buen intento del cine español por conseguir una cinta de terror con exorcismo incluido, pero fallido en casi su totalidad.

Aunque los medios técnicos parecen haber sido suficientes para lograr una buena cinta, lo cierto es que al final es floja, una bala, una ocasión perdida.

Es muy efectista y muy poco eficiente (amén de que los personajes, si exceptuamos la protagonista y su hermano, el resto no se gana la empatía del espectador/a), teniendo tan sólo, en mi opinión, acierto en aspectos como los efectos especiales y visuales, estos gracias a una buena iluminación que, sin embargo, resulta vana pues aunque la historia es atractiva, su puesta en escena aparece torpe, sin ritmo y finalmente tediosa.

Los intérpretes se esfuerzan y María Romanillos demuestra que hay que contar con ella para empresas más serias, pero tanto las situaciones, algunas incongruentes como los diálogos, poco hábiles y en ocasiones declamados que no sentidos, hacen que el film descarrile.

No, no me ha gustado ni convencido aunque no se pueda decir que sea aburrida, pero podría haber dado mucho más de sí.

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