U2 3D

Creía que los conciertos se viven en los estadios, en los teatros, en los auditorios, en los pabellones, en los parques, en las calles, en las playas .... pero hoy, tras el 1,2,3... 14 la sala del cine se convirtió en un concierto repleto de miles y miles de espectadores gritando, vibrando y sintiendo la música de u2.

Puede que al espectador le guste más o menos la música de u2 (a mi me encandila)...pero lo indudable es que U2 es un grupo valiente, innovador, novedoso que utiliza todo lo que esté a su alcance para acercarse a sus fans y para sorprenderlos. Utilizar este novedoso sistema en 3D me parece una avance brillante que logra que te sientas un espectador más de un espectáculo digno de disfrutar.

Siempre soy de la opinión de que aunque no te guste u2, los espectáculos que conforman en cada concierto son dignos de disfrutar y ver... el documental me parece una obra de arte en cuanto efectos, realización, sentimiento y emoción.

No sé si será una crítica objetiva ¿Cuál lo es? Aún viviendo en directo un concierto de esta gira, hoy en la sala del cine me volví a trasladar al pasado para recordar todo aquello que viví en el cesped de un estadio, pero disfrutándolo en un la butaca de un cine con sonido Dolby Sorround.

Yo tuve la suerte de ser uno de los 85.000 espectadores que alucinaron con el concierto de 2005 en Barcelona y no voy a engañaros... las sensaciones que se viven en un concierto superan a cualquier ingenio que el ser humano sea capaz de realizar.

Dicho esto, la experiencia de ver un concierto en 3D de U2 es simplemente bestial. No he parpadeado ni una sola vez, he revivido momentos mágicos de aquel concierto de Barcelona y he vibrado a cada segundo. Hay momentos en los que quieres alargar la mano para tocar a Bono, en los que quieres quitar a Larry Mullen de la batería y ponerte tú... no hay un solo minuto de descanso.

Si te gusta U2 y no las has visto te arrepentirás, si U2 tampoco te mata aunque te van algunos temas y te gusta la música, también te la recomiendo porque es algo nuevo, es una experiencia única y es digno de ver.

Como siempre: U2, un paso por delante

Nunca he estado en un concierto de U2 y lo vengo lamentando desde hace tiempo, pero si hay algo que U23D me ha dejado claro es lo siguiente: no me puedo morir sin ir a un concierto de la banda irlandesa. Sin duda es lo más parecido a vivir en persona el acontecimiento: gotas de agua cayendo sobre ti, tías subidas a los hombros que casi te golpean al agitar sus camisetas, el mástil del bajo de Adam Clayton en tu ojo y el micro de Bono golpeándote la cara... Flipante. Por si fuera poco, U2 tiene uno de los mejores directos, si no el mejor, a pesar de llevar siglos llenando estadios. Tocan temas emblemáticos, uno tras otro, acompañándolos de la espectacularidad que caracteriza la puesta en escena del grupo. Quien haya visto Rattle and Hum, sabe que no va a disfrutar de mejores interpretaciones de Sunday Bloody Sunday o With or Without You, pero oye, que se acercan mucho...
Entra en la sala, ponte las gafas y no pares de gritar.

Para mí una de las grandes pegas es que ya que lo normal es que una película dure unas 2 horas o 2 horas y algo, que el concierto hubiera sido completo, el que se hayan perdido por el camino momentos como "City of blindings lights", duele.

Quizá yo hubiera enfocado el concierto de otra manera para mi gusto, quizá hubiera potenciado aún más la visión desde dentro público eliminando concretamente el enfoque hacia el público que se usa mucho en este documental, aunque supongo que trata de darnos una visión cercana a lo que los miembros del grupo ven desde el escenario pero lo encuentro muy típico de concierto en dvd, personalmente me hubiera gustado más que se hubiera centrado en hacerte sentir que estás entre el público, combinándolo con sentirte a un palmo de ellos en el escenario, en ese aspecto algunos momentos están muy logrados porque consigues sentirte así.

En líneas generales me ha gustado mucho, aunque creo que se abusa demasiado de los fundidos a lo largo del concierto y creo que esto rompe un poco la magia de sentirte que estás ahí "dentro" disfrutándolo, aunque muy acertado en la parte de The Fly, me encantó el juego de imágenes.

Espectacular, impresionante, apabullante, circense y magestuoso. Un paso adelante en la concepción de la representación cinematográfica de conciertos musicales, realizado, no podía ser de otra manera, por U2, la banda de rock más grande del planeta; una categoría diferente, una clase aparte, una concepción cualitativamente superior de lo que es, debe ser, una puesta en escena. El 3D permite acercar a Bono a la butaca del espectador, dejarse acariciar por él, permancer detrás de la bateria de Larry Mullen como si de un técnico de sonido se tratara. No estás viendo un concierto, estás dentro de uno, estás formando parte de él. Quien no pudiera acudir a la gira Vertigo está a tiempo de entrar en el último show, en la última representación, sin necesidad de esperar horas de cola ni calores sofocantes; con la única diferencia de que no podrás saltar ni vitorear durante las canciones, aunque se tenga la imperante necesidad, llevado por la música, de hacerlo.

Las críticas se concentran en dos aspectos, la duración realmente escasa del montaje (llegar a las dos horas hubiera más correcto y hubiera permitido disfrutar de un mayor número de canciones), y por otro lado, la elección del repertorio, excesivamente balanceado al pasado del grupo, con temas como New year´s day, Sunday bloody Sunday,Bullet the blue sky o Pride y olvidadizo de sus más actuales creaciones: City of blindings lights, Walk on, o incluso de esa maravilla transgresora llamada Achtung baby de la que sólo se rescatan la celebérrima One y The fly. Por encima de todo esto, una ocasión única para disfrutar y emocionarse.