Haz click aquí para copiar la URL

El chico que robó un millón

Acción. Aventuras. Comedia Un joven que trabaja en un banco de Valencia toma "prestado" un millón de pesetas, con el fin de que su padre pueda pagar la reparación del taxi. Como resultado, le persigue no sólo la policía, sino una serie de hampones que desean apoderarse del botín. (FILMAFFINITY)
Críticas 1
Críticas ordenadas por utilidad
21 de octubre de 2016
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Muy interesante película de Charles Crichton, director inglés de heterogénea y atractiva filmografía. En el género cómico destacó con obras como Los apuros de un pequeño tren u Oro en barras. En ellas, trataba personajes con cierto encanto, con los que era fácil empatizar, poniéndolos en situaciones arriesgadas en las que sus fines venían a justificar sus medios.

Con esta película rodada en España parece querer adaptar ese estilo a las circunstancias e idiosincrasia ibéricas. El protagonismo corresponde a un niño que ante las penurias económicas de la familia, decide “tomar prestado” un millón de pesetas al banco.

Parece la típica historia de la vida vista a través de los ojos de un niño. Y lo es, porque la inocencia infantil es el motor de la acción. Pero tiene muchos más detalles que la enriquecen y le aportan originalidad e interés. Su credibilidad reside en la sencillez de la historia, y en la austeridad de la propia producción, sin actores de renombre ni grandes alardes técnicos.

Mi alta valoración se debe, además, a que todos los exteriores fueron rodados en Valencia. Y ver en pantalla grande cómo era tu ciudad hace 50 años es un espectáculo muy valioso para cualquiera. Vemos la Plaza del Ayuntamiento, la Calle de la Paz, la Plaza de la Reina, el Hotel Astoria, el cauce del río Túria, y un largo etcétera de localizaciones reconocibles. De lo más curioso ver los tranvías pasando por debajo de las Torres de Quart y Serranos, o la cremà de la falla Serranos. Observamos cómo el paso del tiempo ha cambiado nuestra ciudad. Cómo era en plena postguerra, mucho antes de expandirse con el boom urbanístico a partir de los 80 y 90.

Por desgracia, esta gran película no consiguió estrenarse en su momento. Ahora la filmoteca valenciana la ha rescatado durante dos sesiones, y he sido de los pocos afortunados en verla. Ojalá se programe más a menudo. Yo pasé un muy buen rato, disfruté como un enano.

En cuanto a estilo cinematográfico, se nota la influencia del neorrealismo italiano, con El ladrón de bicicletas como mejor ejemplo, pero conforme avanza se notan rasgos propios, como explico en spoiler.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
cinéfilo compulsivo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow