El ascenso de las Tortugas Ninja (Serie de TV)

Sin más dilación y sin ánimo de ser exhaustivo, os mostraré por aquí todos los detalles que me han llamado la atención y que detesto de esta serie:

1. El cambio del diseño de los personajes.

Como bien he descrito más arriba, el diseño de los personajes son horribles, mostrándonos a un Rafaello con una altura y una musculatura que hasta el Knuckles de 'Sonic Boom' envidiaría, a un Donatello (mi Tortuga Ninja favorita) con un cabezón tan grande que da repelús y a unos Leonardo y Michelangelo bastante delgados. Y más que tortugas, con esos picos que llevan, parecen más ranas con mochilas de Decathlon. Lo que más me tocó la moral, en cuanto al diseño se refiere, es que hicieran a April O'Neil como una persona de color con más agallas que sus amigos quelonios. Mirad que yo no estoy en contra de los personajes de distinta raza o etnia, pero me resulta estúpido que metieran este cambio de diseño con calzador. Pero lo que sí me irritó fue el diseño del maestro Astilla, que más que una rata, parece un hámster con una cola de pega. Además, como bien se mencionó en una entrevista, los diseños de las Tortugas se basan en cuatro distintas especies de quelonios conocidos, algo que me dejó perplejo y pensando el cómo de mierdoso será el origen de su transformación.

2. El cambio de los roles y personalidades.

Esta parte es la que más me toca las narices. Como bien sabéis, las Tortugas Ninja tienen una personalidad y un rol destacables: Leo es el líder, Mikey es el bufón, Don es el cerebro y Raph es el rebelde. Y estas personalidades van vinculadas tanto con el color de sus antifaces como en sus armas, lo cual se remarcó tanto en la serie de 2003 como en la de 2012. Pues parece ser que los creadores de esta nueva serie deben sufrir de pérdida de memoria porque cambiaron por completo todo eso y más. Para empezar ponen a Raph como líder y a Leo como el rebelde. ¡No me fastidies! ¿Por qué, si Raph como líder nunca ha destacado y hacía lo que le salía de la concha? ¿Es por el color de su antifaz? ¡Les recuerdo que esto no es el parchís! Y lo peor es que se comportan como si fueran niños malcriados. Luego está "April", que a veces pienso que ella tiene más pinta de ser líder que el "nuevo líder". Perolo más irritante es la personalidad del maestro Astilla, el cual casi siempre está viendo antiguas películas de artes marciales, tomando leche con galletas y planchando la oreja en su sofá. Si eso es un maestro, yo soy médico en el psiquiátrico Arkham.

3. La historia.

La nueva historia tiene más lagunas por metro cuadrado que el jardín del señor Burns. Como bien escribí más arriba, los creadores de la serie se basaron en el diseño de cuatro distintas especies de tortugas, algo que no me quiero imaginar cómo de mal se desarrollará su origen. Lo que sí destaco es el origen del maestro Astilla: en vez de ponerlo como un maestro que desertó de su Japón natal yéndose a vivir en Nueva York como un pordiosero (como en la serie de 1987) o como una rata doméstica que perdió a su dueño el cual era un maestro de artes marciales a manos de Shredder (como en el cómic original y en la serie de 2003), van y lo ponen como un actor retirado que siempre tenía el ego muy subido. Es como si estuviese viendo una versión cutre y casposa del personaje de Johnny Cage de la saga de videojuegos 'Mortal Kombat'.

Si queréis que vuestros retoños se diviertan con las series de las Tortugas Ninja, ni se os pase por la cabeza el ponerles esta basura.