Middleditch & Schwartz: Especiales de comedia 100% improvisados (Miniserie de TV)

La premisa de este show es muy sencilla, pero no por eso fácil de ejecutar. Dos cómicos se plantan en un escenario desnudo, con tan solo dos sillas. Tras una breve presentación lanzan una pregunta al público del tipo: ¿Qué os preocupa? Con la respuesta de alguno de los espectadores y un pequeño interrogatorio al mismo, todo en clave de comedia, claro, comienza la magia. Sobre el diáfano escenario comienzan a construir una historia totalmente improvisada, con los pocos datos que han reunido previamente.

El ritmo es trepidante, la agilidad de estos dos talentosos humoristas hace que sean capaces de salir de los embrollos en los que ellos mismos se meten. Está permitido que se les escape una carcajada de vez en cuando por que hasta a ellos mismos se hacen gracia. No caen en la broma fácil, la vulgaridad o lo soez, aunque tampoco renuncian a ello. El espectáculo no decae en ningún momento y son capaces de llevar la representación hacia un cierre, tan surrealista y divertido como el resto de la función.

En definitiva, un producto muy necesario en estos tiempos de reclusión y confinamiento infinito que hará que por un rato te olvides de lo que pasa fuera de casa y que te duelan las mandíbulas de tanto reír.

Si estás buscando buenas dosis de humor presta atención a este especial que no hace mucho estrenó Netflix. ‘Middleditch & Schwartz‘ es un programa de tres episodios protagonizado por Thomas Middleditch y Ben Schwartz, dos conocidos cómicos que se han dejado ver en series como ‘Parks and Recreation’ (Schwartz), o ‘Silicon Valley’, que su protagonista lo interpreta Middleditch.

No estamos hablando de una serie de humor, tampoco de un especial de monólogos, ni si quiera de un stand-up. ‘Middleditch & Schwartz’ es un especial de improvisación, donde los dos personajes dan rienda suelta a su interpretación, sin guión y mucho sentido del humor.

Una idea minúscula, una historia divertida

La premisa del show es de lo más sencilla: los dos actores se plantan en el escenario, interactúan un poco con el público preguntándoles qué es lo que más le preocupan, y tras una breve conversación inician su improvisación inspirándose en el contexto de la conversación que acaban de tener.

La premisa es sencilla pero eso no quiere decir que sea fácil de ejecutar. La improvisación es un arte que requiere mucho talento, mantener la compostura y adaptarse cada segundo al rumbo que toma la historia en función de lo que hagas tú o tu compañero. Por eso ver tal despliegue de talento con una perfección maravillosa, manteniendo el hilo y otorgando unas risas enormes hacen que este show sea muy especial.

Thomas y Ben se plantan en un escenario vacío sin mucho más que dos sillas. Si la historia empieza en lo que podrían ser dos estudiantes en una aula de clase, la cosa puede acabar con diez personajes más y hasta un maldito alienígena que nadie sabe de dónde ha salido, todos interpretados por ambos actores y no necesariamente interpretando siempre a los mismos personajes.

Los actores cogen una idea minúscula y logran convertirla en toda una historia alocada, llena de momentos y situaciones totalmente inesperadas y divertidas.

- Un gran sentido del humor

El show destaca especialmente por no caer en la broma fácil o vulgar, su humor reside en lo hilarante de la situación y el rumbo inesperado que toma la trama en todo momento. Los actores logran abordar muy bien la situación, y su experiencia en comedia y el carisma que desprenden aportan el resto para dotar al show de un gran sentido del humor.

Ahora bien, el programa es corto, cuenta con tan solo tres episodios, y los tres no brillan por igual. Si os gustan las experiencias de peor a mejor, al tratarse de episodios independientes no es una mala opción empezar por el segundo seguido del tercero, y finalmente ver el primer episodio.

La improvisación es un arte de la comedia poco conocido entre la gente común pero realmente muy habitual en teatros. Es fácil encontrar espectáculos como el ‘Improshow’ en Barcelona, o también ‘Corta el Cable Rojo’ en Madrid.

Aún así destaca el hecho de que Netflix haya querido llevar el formato a su plataforma, pues no es habitual ver esta clase de especiales en una plataforma de streaming.

Más razón para darle una oportunidad y verlo.

Reseña original:
https://desophict.com/cine-y-tv/middleditch-schwartz/

Una de las cosas más maravillosas del teatro o de la actuación en general es la improvisación, tu mente tiene que estar a mil constantemente buscando algo para hacer, además de estar abierto a lo que tu compañero o compañera de escena te puede proponer. La primera ley de esto es “Si, y…” nunca decir no, el famoso “si fácil”. Esta mini serie de tan solo tres capítulos lo demuestra a la perfección, y estos dos muchachos se conocen muchísimo y hacen un show increíble.

Creo que hace mucho que no me reía tanto, al nivel de tener varios destellos de carcajadas imagínense que me dijeron que me escuchaban de delante de mi casa las risas. Tan solo la idea de ver dos personas improvisar me parece maravilloso, y más lo que proponen estos dos simpáticos muchachos. El juego consiste en preguntarle al público alguna situación que les de ansiedad o que estén esperando con muchas ganas, le hacen unas preguntas y ahí comienzan a jugar, porque lo que hacen ellos es juego al mejor estilo niños de 5 años con su imaginación a full.

Una de las cosas que me parecieron también interesantes es que ellos dos no buscan ocultar su risa o no tentarse, si les viene una risa por lo que el otro o ellos mismo están haciendo, la largan e incluso se ponen a hablar como ellos. Es increíble la cantidad de personajes que dos personas pueden hacer, hacen tantos personajes que por ahí se pierden, y verlos tratando de recordar todo es también divertido.

Creo que quizás un problema para algunos espectadores puede llegar a ser los subtítulos. La comedia tiene ciertos códigos o ciertos juegos de palabras que quizás en otro idioma no causa la misma gracia. No estoy diciendo que, si no entendes inglés no la vas a disfrutar, creo que quizás podés llegar a perderte algunos chistes, todo depende de los que hicieron los subtítulos, si encontraron un buen paralelismo.

En definitiva, es una serie o un especial de comedia muy divertido, ellos dos por separado ya son divertidos, imagínense lo que pueden ser juntos. Me dieron ganas de verlos en vivo, ver ese show y reírme a carcajadas sin preocuparme de nada.

Mi recomendación: Es una serie muy buena, muy divertida, para relajar y desconectar del mundo un ratito.

Mi puntuación: 9/10

Donde Verla: Netflix

Tiempo invertido: 1 temporada, 3 episodios. 42-50 minutos.