Cuando las cigarras lloran (Serie de TV)

Asombrado, estupefacto, así me quedé al terminar de ver esta magnífica serie que por cierto tiene varias secuelas. Qué forma de contar una historia tan interesante.La historia está contada por diferentes sagas, en cada cual el argumento va avanzando cada vez más. Una completa sensación de misterio te invade y no te dejará escapar hasta que termines de verla. Los personajes están muy bien hechos. El pequeño pueblecito llamado Hinamizawa es muy acogedor y el festival del Watanagashi es aterrador. A lo largo de la serie piensas es cómo pueden pasar la noche del Watanagashi tabn tranquilos sabiendo que alguien va a morir y sucesivamente una persona va a desaparecer...
Me ha encantado el halo de misterio que rodea al personaje de Satoshi-kun, en la última saga de esta primera temporada se desvela algún que otro misterio.

Me parece apasionante la forma en la que está contada la historia pues es muy original y te mantiene con la intriga.

HACERME CASO Y VER HIGURSHI NO NAKU KORO NI , no lo lamentaréis. Os lo aseguro.

De las mejores anime que he visto, y creo que es el que más me ha gustado, es increíble!! Cuándo empecé a verla, creía que era la típica serie Harem o de comedia (que me gusta), pero me equivoqué...

OYASHIRO...SAMA...

Con solo ver la primera escena del primer capítulo, no sabía exactamente donde me metía, ya con la primera escena te impacta de una manera que nunca me ha pasado. Lo que creía que iba a ser una serie de risa acaba convirtiéndose en una de las series mas bestias que he visto...
Pero también el modo en que te cuenta la historia te deja un poco desconcertado:

-La primera temporada te lo divide en cuatro arcos, donde te presenta un final.
-En la segunda temporada te muestran esos mismos arcos desde otro punto de vista y que te sirven de ayuda para entender los cabos sueltos de la primera temporada.

Esto me sorprendió gratamente y me atrajo aún más en el mundo de Higurashi... Esta serie cambió mi punto de vista de los animes e incluso ahora, me sigue encantando, y todavía no he dicho nada de la Banda sonora ya que es demasiado buena como para escribirlo aquí.

En definitiva, uno de los mejores animes y con mejor historia que te puedes encontrar, no apto para personas asustadizas.

  Hinamizawa es una pequeña villa, tranquila y pacífica, donde los ciudadanos viven rodeados de naturaleza y buenas personas; un lugar idílico donde reconciliarte contigo mismo. Eso pensaría cualquiera que paseara por sus adorables calles. Pero la piel de corderito más tierna y blanca puede ocultar al monstruo más viejo y sucio en ella. Los que viven en Hinamizawa están malditos, eternamente a merced de la voluntad de un poder superior -sea lo que sea-, que quiere a su rebaño unido y sumiso.

  Pero como espectador ¿Cómo saber qué es real y qué no? Los ojos de un loco no ven lo que ve una persona sana, los oídos de un adulto no escuchan lo que un niño oye. Higurashi no naku koro ni juega con el espectador al juego de cartas que tanto divierte al club de los protagonistas: ¿Quién ha hecho qué y por qué? ¿Realmente las muertes son obra de un demonio, o de manos humanas ávidas de odio y venganza? ¿Y cómo saber que algo ha ocurrido de verdad? ¿Cómo estar seguro de que lo que vemos no es fruto de la mente enferma de alguno de ellos, dulces criaturas? Cuando el monstruo más viejo y sucio se viste con la piel de cordero más nívea y suave, se desata la desgracia.

 Esa es la mejor baza de éste anime: el juego que se trae con el espectador. Al principio creemos que se trata de distintas líneas de tiempo, o un bucle eterno en el que ha entrado Hinamizawa porque las cosas no han ocurrido como debían ocurrir. Pero desde el principio hay algo que no encaja.

  Supuestamente cada año durante el festival de Watanagashi una persona muere y una desaparece. Durante cinco años y como una marca maldita esa fórmula se ha mantenido siniestramente íntegra. Una muerte y una desaparición: esa es la regla. Pero nada más empezar Higurashi no naku koro ni vemos a Keiichi destrozando a golpes a dos de sus compañeras de clase: Mion y Rena. La primera línea de tiempo muestra cómo un joven ajeno a Hinamizawa y la maldición empieza a desconfiar de sus amigas hasta el punto de convencerse de que quieren matarle. Pero ¿es su sospecha real o producto de una creciente paranoia? ¿Acaso las chicas jugaron a un juego que se les fue de las manos? Keiichi, muerto de miedo, llama al investigador Ooishi y sus últimas palabras son para Oyashiro-sama, quien -Keiichi está seguro- le persigue. El hecho es que ha matado a dos personas, la maldición ha cambiado... ¿O todo forma parte de un plan superior?

  Antes de que podamos comprenderlo, Higurashi no naku koro ni nos devuelve a la casilla de salida, donde vemos a una desquiciada Mion riéndose a carcajadas mientras observa a la pequeña y angelical Rika desollándose a sí misma. Y después de esa segunda línea de tiempo, en la que conocemos más a nuestros personajes, volvemos a empezar. Y otra vez.

  Tras unos capítulos más somos conscientes de que cada arco no es una distinta línea de tiempo. No es que en cada caso el día del inicio se repita con caminos truncados para nuestros protagonistas. Dos arcos pueden ser la misma historia pero contada a través de los ojos de otro personaje. Hay arcos que nos muestran incluso el pasado, cinco años antes de que Keiichi pisara esa villa de malditos: cuando todo comenzó.

  Higurashi no naku koro ni es un brillante acertijo compuesto de pistas, cada arco representa una pieza separada del puzzle, que no comprenderemos hasta que unamos todas sus partes. Y ya en el antepenúltimo capítulo, cuyo arco se centra en Rena, divisamos la horrible verdad de "la maldición de Oyashiro-sama". La respuesta a todas las preguntas.

  Higurashi no naku koro ni no debe tomarse a la ligera, a pesar de sus tambaleantes y confusos inicios. Es un anime extraordinario en su género. Cada capítulo ahonda más en la esencia de Hinamizawa y sus gentes, como una venenosa espiral, hasta el soberbio climax final. Éste anime, como una demoníaca deidad, juega contigo y te engaña hasta el último capítulo; y al final no queda más remedio que reconocer la verdad: Nunca tuvimos el control. Creíamos entretenernos con Higurashi no naku koro ni, pero era él el que se divertía con nosotros, jugando con nuestras emociones y pensamientos.

Quizás nunca tuvimos una oportunidad....

Soy un buen admirador del manga y el mundillo otaku, sin ser especialmente un fanático. Normalmente suelo ver diferentes animes serios y dirigidos a un público adulto. Aparte de eso, soy gran admirador del género thriller y policíaco, y muy cinéfalo en general. Es por eso que a veces, esa voz pública que dice "el manga es de críos, no veas chorradas", me taladra la cabeza. Lo que hago entonces es acordarme de series como esta.

Esta increíble obra maestra del anime es la mejor serie que he visto en mucho tiempo. A su lado, Twin Peaks es una tontería comercial. Al empezar la serie, lo único que ves es niños con diálogos tontos y niñas tímidas con cabellos de colores. Pero entonces oyes ése diálogo o ves ése plano, y de repente, te quedas loco.

No hay palabras para describir la piel de gallina que provoca esta serie en todos los momentazos que llenan cada uno de los capítulos. Todo está perfectamente preparado para que te quedes hipnotizado delante de la pantalla. Su humor de críos en la mayoría de escenas provoca que, en los momentos en que la tensión sube, recorra por tu cuerpo un calambrazo de adrenalina. No hay palabras, en serio.

Vaya que pedazo de serie, no soy mucho de mangas, ovas, animes y demás, pero a esta serie si la pongo quizás entre una de las mejores del genero.

Es un manga de terror con tintes de thriller e intriga que contiene 6 historias conectadas entre sí, cada historia es un cuento espeluznante y cada uno de ellos da a conocer de manera nada confusa y bien detallada a cada personaje, digo nada confusa porque es muy propia del manga tener tramas muy surrealistas que cuando mas avanza mas te revienta la cabeza.