La representación de los extraterrestres, aunque al principio choca un poco, es bastante buena y para nada da esa sensación de "artificialidad" como en muchas otras producciones. Podrá gustar más o menos, pero al menos está trabajada, algo que no suele ser fácil.

El argumento se basa totalmente, drama familiar aparte, en ese intento de la humanidad, personificado en la protagonista, por intentar entenderse con esos visitantes de fuera de nuestro mundo. ¿Quiénes son? ¿Por qué están aquí? La inmersión y el cómo la película te sumerge en esa primera sensación de desasosiego y confusión, para luego poco a poco y de forma gradual, llevarte a sentir esa satisfacción a la vez que Louise al conseguir progresos. Es fascinante la forma en la que el director logra hacer formar parte al espectador de lo que está viendo, casi como si lo estuviera viviendo.

Y aquí entra también otra de las claves de la película, el lenguaje de los extraterrestres. Esos símbolos, pero sobre todo esa forma de pensar que va intrínseca a ellos. Nada que ver con nuestros lenguajes y lo que sirve de "pretexto" para enlazar con el asunto de la posibilidad de ver el futuro de Louise una vez aprende el idioma extraterrestre y adopta su forma de pensar, lo que le lleva a arreglar el entuerto que se había formado entre las diferentes naciones (otra moraleja interesante, el como siempre tendemos a autodestruirnos entre nosotros y deberíamos aprender a colaborar más).

Claro está, una vez uno comprende esto, se da cuenta de que lo que durante toda la película creímos recuerdos, flashbacks, de la vida (trágica) de Louise, es totalmente lo contrario. Es el futuro, lo que está por venir, o incluso como lo entienden los heptápodos, simplemente el tiempo no es lineal y así nos presentan la película. Y además no de forma tramposa, como en otras historias, sino perfectamente detallado: ese heptápodo de plastilina, ese padre "de ciencias"... todos pequeños detalles, que en el momento no nos dicen nada, pero una vez comprendida la película, salen a la luz.

En definitiva, La Llegada es una película cuidadísima, detallista, emocionante y que te sumerge de principio a fin en la historia. Ningún amante de la ciencia ficción debería perdérsela.