La nueva película apadrinada por Peter Jackson da aún más de lo que promete el trailer, si bien tiene algunos pequeños fallos debido a la escasa experiencia del director.

El director novel Neill Blomkamp imprime a la cinta una aire realista y cercano gracias al estilo de falso documental, lo que favorece considerablemente el resultado final, pero con la pega de que en múltiples ocasiones (sobre todo en las escenas de acción más grandilocuentes) pierde esa estética de falso documental al grabar la acción desde diversos ángulos. Pese a ello, la acción está muy bien rodada y no pierde ese realismo que caracteriza a todo el film, gracias al uso de la cámara en mano y los efectos sobre la lente de la cámara de barro, sangre, tierra... que salen volando debido a tiros o explosiones.

Además, toda la cinta posee una gran crítica a las grandes corporaciones y a los gobiernos que se aprovechan y se lucran de las desgracias ajenas.

Por todo ello es una apuesta muy refrescante y novedosa en el género de la cienci-ficción, tan denostado últimamente.