Y así es, para alguien que nunca haya escuchado hablar de la película, ninguna crítica ni ninguna pista se encontrará pensando que va a poder ver, al ser de los hermanos Coen, la cima de los telefilms cutres de la hora de la siesta, pero no, quiero decir: no solo eso, conforme avanza la película te das cuenta que no es otra película del típico estilo sino que es algo más, una comedia negra, donde todos los personajes son bastante torpes, el que tiene un poco más de luces es el rey, y es una serie de despropósitos y situaciones inverosímiles que harán las delicias de quien lo viera con expectativa de que no fuera lo típico o de quien sea muy receptivo a las sorpresas deacuerdo a lo que uno se espera.

La fotografía, que da cabida a ello, es sencillamente genial, se consiguen grandes planos, la nieve ayuda a ello. Las interpretaciones brillantes, y mira que debían ser papeles difíciles desde mi punto de vista.

En general, no es una obra maestra, puesto bajo mi punto de vista es imposible hacer de algo así obra maestra, pero si es una genial obra que se merece entre un 7 y un 8. Un aplauso para los Coen.