Un indígena maorí, es acusado injustamente de un asesinato que no ha cometido, un ex guerrillero Boer, intentara capturarlo, cuando lo consigue, empieza a surgir entre ellos una relación de respeto mutuo.

Estupendo largometraje de perseguidor y perseguido rodado en clave de western crepuscular, que nos habla del valor de ciertas causas, como la defensa de tus tierras ante el colonizador extranjero, la defensa de tus tradiciones y culturas, el recuerdo de la familia perdida, la libertad, la valentía y el respeto hacia los demás.

Correcta la interpretación de los dos actores principales, Ray Winston y Temuera Morrinson. Magnificas localizaciones, con hermosos paisajes de Nueva Zelanda.
Con un guión bastante sólido, y buen ritmo narrativo durante todo el metraje, con algún giro sorprendente, este largometraje consigue que permanezcas atento a la pantalla durante toda lo proyección.

De lo mejor que he visto estos últimos días, aplausos al terminar la proyección.