Veamos, no pasa nada por seguir un poco la corriente que impere en cada momento: que si el hulla-hoop, que si Vanilla Ice ice baby, que si las camisas de leñador en agosto, que si los pantalones piratas a lo Rafael Nadal sin tener su físico...y así hasta el infinito y más allá. Y digo esto porque recuerdo que todos los cinéfilos estaban que no paraban con esta película en su estreno, caso parecido y de similares consecuencias a "El lobo de W.Street". Pues con el sosiego que dan los años transcurridos, se puede decir que es una película estimable, pero con bastante cartón.
Referencias escandalosas como por aquí se ha apuntado, las hay: Miami Vice en los créditos y la música atmosférica durante las interminables conducciones de nuestro impávido protagonista, y el tufillo al Travis de "Taxi driver" a mi me parecen las más evidentes.
Digamos que la interpretación del señor Gosling está cerca del concepto minimalista espacial que tanto agradó para los espacios diáfanos en la primera década del siglo XXI: inanidad gestual, que en momentos roza la parodia. Los secundarios bastante caricaturizados en estereotipos explicados una y mil veces en el cine usamericano. Destaco el desaprovechamiento de Heisenberg Cranston y Pearlman, y el mejor de la función sin duda, Albert Brooks.
Tiene escenas apreciables, otras copiadas burdamente de películas anteriores, y otras risibles y absurdas. No las detallo porque son fácilmente identificables.
Por momentos, pensé que Gosling salía de "Boilling point" del japonés hierático...
Nota: 5,70.