A estas alturas, hablar del cine fantástico italiano, es hablar de Lucio Fulci, Dario Argento, Mario y Lamberto Bava. Todo ellos en mayor o menor medida tiene algún clásico del cine fantástico-terror que ha logrado influenciar al cine americano.

Por desgracia, el tardo giallo al que asistimos con "La Secta" no sólo comete los mismos errores e incongruencias de los anteriores realizadores. Si no que además se recrea en la "simbología" estúpida y pretenciosa de imágenes icónicas: pozos, sábanas santas y plagios a Hellraiser. Todo bien mezclado y sin una lógica que de sentido al metraje.

El argumento está claro que navega entre lo onírico y lo cutre. Porque el director es como si se hubiera levantado un día cualquier soñando con un pozo escupe "trapos posesivos" y lo mezclara con "La semilla del Diablo". Incurre en las mismas sandeces que "Inferno" (aka"Suspiria 2") donde el agua, los pozos, pasadizos secretos y imágenes más o menos sugestivas aunque indigestas, son vomitadas literalmente sin apoyarse un argumento sólido que de validez y sentido a la historia.

Pino Donaggio, el mítico compositor de películas como "Vestida para Matar" y la maravillosa "Doble Cuerpo" se hunde en el mismo pozo de la película: su música no sólo no alcanza la perfección conseguida en "Doble Cuerpo" si no que encima es machacona e insustancial.

Es una pérdida de tiempo y no es recomendable salvo para mostrar lo que no se debe hacer en una cinta de terror/misterio.