A lo dicho en el título sólo añadiré que me pareció un elegante ejercicio de estética visual y una música que era fiel reflejo de los sentimientos.
La primera vez que la vi tenía 15 años y me pareció maravillosa, bella y sutil. La interpretación de Juliette Binoche como esa mujer de emociones reprimidas, que expresa con la mirada lo que no hace su cuerpo, es magnífica. Para mi es la historia de un ser humano que se encuentra con la desgracia y a partir de ahi renace, pero ya no será la misma mujer, se abrirá poco a poco a sus sentimientos y hacia los de los demás. Pasa de ser tremendamente fría (el azul) a irse derritiendo paulatinamente ante el contexto que la rodea y los hombres y mujeres que lo habitan. En ese viaje va descubriendo emociones como la compasión, la comprensión y algunas que pensaba olvidadas como el amor.
Me centro en el personaje principal porque lo cierto es que todo gira en torno a ella, a lo que observa, a lo que hace, piensa o decide. No recuerdo muchas escenas en la que ella no este presente. Absorve el protagonismo, para bien en este caso, porque la comedida y estudiada interpretación de la actriz francesa es excelente. Se nota que me gusta la elegante Juliette no?

Saludos.