Esta película es pretenciosa y cargante. O sea, la crítica la adora.

Aunque me desespera ver esta dicotomía entre crítica y opiniones de gente normal, lo cierto es que me ha sorprendido ver que tiene bastante nota aquí, porque yo me aburrí como una ostra y me pareció una película sin alma.

La trama que se anuncia simple desde un principio, termina siendo aún más simple, y no consigo empatizar con ninguno de estos personajes (son, o desagradables, o antipáticos, o ambas cosas a la vez).

Esta película, que versa sobre las vidas de tres mujeres de la corte inglesa del siglo XVIII, a priori poderosas, inteligentes y autoritarias, comete el imperdonable error de llevarlas por la senda de los eternos clichés que se nos ha atribuido siempre al género femenino (sigo en spoiler).

El ritmo es lento e irregular, con algunas escenas irrelevantes para el desarrollo de la trama y encima, innecesariamente largas (estoy pensando en la pelea del bosque).

Además, el director ha considerado importante martirizarnos con una musiquita repetitiva y sumamente desagradable en los momentos de supuesta carga dramática, no vaya a ser que a pasen desapercibidos!

¿Las actrices? Maravillosas, claro.Desaprovechadas también.

Y bien guapas con sus vestidos encorsetados.