Este Gyllenhall es un actor como la copa de un pino. Aun no he visto un film suyo que me haya desagradado. Camaleónico ... como amigo de un conejo (Danny Darko), soldado (Jarhed), exótico saltarín (Príncipe de Persia), truchón infeliz (Brokeback Mountain), frustrado detective (Zodiac), conejillo de indias de la ciencia (Código Fuente)... y ahora, un patrullero listillo empeñado en filmar su ronda diaria, éste actor como digo merece una gran felicitación por cuidar mucho los títulos que escoge y de esa manera relanzar continuamente su buenhacer profesional.

Hay puntos de la historia que la dejan, por así decirlo, inacabada, malograda, o poco redonda, pero ver en pantalla al elenco protagonista hace disculpar sus carencias. Si bien tampoco he caído en esa empatía incondicional con los protagonistas como parece que ha hecho gran parte de la crítica, considero que es una obrita recomendable y bastante aceptable para llenar un par de horitas de ocio sin nada que hacer.

Y es que ellos vigilan para que se cumpla la ley, enfrentándose a toda clase de violencia y de horrores. Pero a veces a ellos, ni los protegen sus propios colegas de profesión... hay que tenerlos bien grandes para dedicarse a esto, hermano...