Musicales sobre superhéroes no hay muchos. De hecho, se pueden contar con los dedos de una mano. Recuerdo que intentaron montar uno sobre Spider-man, que no llegó a buen puerto, y otro sobre Batman, este último con las composiciones del gran Jim Steinman , que tampoco llegó a nada, pero cuyas canciones pueden encontrarse en youtube.

"Dr. Horrible" es un divertimento sensacional. Una vuelta de tuerca, musical, al enfrentamiento entre Superman y Lex Luthor, en la que el superhéroe es un majadero y el supervillano, no pretende estrictamente hacer el mal, sino cambiar el sistema. Te cae mejor Dr. Horrible que el Capitán Hammer. Esa simpatía por el malo ya la vimos en "Gru, mi villano favorito" o en el doctor de "Phineas y Ferb". Son malos porque los buenos han abusado de ellos.

Las canciones son magníficas y la interpretación sublime. Neil Patrick Harris dota a su personaje de suficiente carisma y medida exageración para disfrutar en cada una de sus apariciones. Se come el mediometraje. Y su manera de cantar es excepcional. Harris está dotado con una paleta de registros y una textura de la voz fuera de lo corriente, además de acompañar la interpretación de una gesticulación que acentúa lo que canta. Puedes sentir lo que el personaje siente, su amor, odio, frustración y su gran pena. Junto a él no desmerecen los otros protagonistas, sorprendiendo la bis musical de Fillion.

Pero un buen cantante, necesita de buenos temas. Y los compuestos por los Whedon son soberbios. Sin duda, la inspiración de apoderó de ellos para plasmarlos en papel.

En conjunto, tenemos un mediometraje de esos que se hacen de culto a la semana de ser emitidos. De esos que la gente recuerda con cariño y que hacen que veas de otra manera a los intérpretes. Harris de ha dejado ojiplático.

No obstante, el mejor musical sobre superhéroes que he visto y oído, y lo disfruté por su gran calidad, fue un episodio de la serie de animación sobre Batman, "The Brave and the bold", titulado "Mayhem of the music meister", estrenado apenas un año después del mediometraje de los Whedon y cantado también por Neil Patrick Harris. Composiciones muy similares. Sin duda es el gran heredero musical de este mediometraje y vale la pena disfrutarlo.