Tras ver, con mucha dificultad, este engendro, no es difícil comprender como la saga clásica del doctor Who iba cuesta abajo en calidad e interés, hasta superar el límite de no retorno. Por ello, este fue el último Doctor de la serie televisiva e intentaron resucitar la saga con el octavo doctor, en un largometraje para TV que no tuvo suerte. El resto es historia. Curiosamente, la historia, como bien dicen, se repite, y la execrable decimotercera Doctor sigue el mismo camino que el séptimo Doctor, en manos de guionistas ineptos, un showrunner aún más inútil y con ínfulas de cambiar la sociedad destruyendo 60 años de legado común televisivo.

Pero vamos a este arco de episodios. Un guión incomprensible, que necesita varios revisionados para entender de que va, y yo no estoy dispuesto a tragarme tamaña porquería de nuevo. Una casa victoriana donde habitan unos bichos humanoides con smokin, un neardenthal llamado Nimrod, un cazador loco, una familia rarísima y un tipo llamado Josiah que no se sabe que quiere. Por en medio tienen a señores metidos en inmensas cómodas, en cajones, como si fuesen muñecos y aparece un tipo raro y alienígena, un tal "Luz" que parece un vampiro trasnochado. Todo muy raro. Lo dicho, necesitas un manual para entender esto. parece que en cada secuencia improvisasen guión y diálogos. De pronto transforman a un predicador en gorila o dicen que envian a los desaparecidos a "Java"(¿?) y la computadora llamada "control" se transforma en una humana irritante, mientras las criadas aparecen a determinadas horas, como robots, saliendo del armario. Y todos se atacan entre sí. Y que sé yo. Es para arrancarse los ojos. Si eres fan del Doctor, por favor, no veas esto.