Miniserie de tres episodios estrenada en algunos países como un filme, "Viaje a la Atlántida del Capitán Nemo" es un muestrario de la ciencia-ficción obsoleta que abundaba por la televisión estadounidense en las postrimerías de los años 70 (Buck Rogers, la mujer biónica, la Fuga de Logan, etc), con unos decorados que recuerdan al puente de mando de Star Trek, pero con unos vestuarios viejunos, unos androides de risa, unos efectos espaciales a base de rayos pintados, explosiones y maquetas más próximas a los "Thunderbirds" que a "Star Wars", una definición de personajes demasiado arquetípica, con un Capitán Nemo inteligentísimo, unos coprotagonistas sin apenas diálogos y que hacen bulto, una chica a la que es preciso rescatar, y un villano, quizás lo mejor del filme, encarnado por un Burgess Meredith, que nos muestra lo peligroso que es un profesor despistado con aviesas intenciones.

La estructura es la fusión de los tres episodios: presentación de personajes-aventura en la fosa de Mindanao-Descubrimiento y rescate de la Atlántida. Dicha fusión es realmente chapucera en algunas ocasiones, faltando numerosas escenas que facilitarían el seguimiento de los sucesos que en el filme se suceden. El guión y las situaciones también son demasiado tópicas, con una familiar sensación de dejà vu.

La realización es plana y funcional, como de tantos telefilmes, sin un atisbo de personalidad del realizador. No hay emoción. No obstante, su visión puede ser de interés a quién le gusten los telefilmes de sci-fi setenteros. Los aficionados a los efectos digitales de ultima generación, abstenerse.