Un detective con problemas de alcohol se hará cargo de una serie de asesinatos en los que como fetiche aparece un muñeco de nieve.
Pronto llegará a la zona una detective con unos casos antiguos que parecen tener relación con los asesinatos actuales.En distintos momentos de la película aparecerán los clásicos flasbacks, que a mi entender enmarañan más las trama que otra cosa.
El asesino sigue un ritual y es el de matar en los día que nievan. Un apunte éste que carece de la mayor importancia, así como la aparición de un muñeco de nieve cerca de los asesinatos que se supone que deberían de inquietar y perturbar al espectador y ofrece todo lo contrario, una indiferencia absoluta.
Muestran en una de las primeras escenas a Harry(Michael Fassbender) con una botella que más adelante explicarán su condición de borracho. Cosa que tampoco llega a conmover ni a provocar un sentimiento de lástima en el espectador. Es más, a lo largo de la película no se ahonda en éste problema de la bebida y casi diría que la actuación de Michael Fassbender es tan deficiente que no ayuda a entender su adicción y no está bien escenificada.
Como thriller no aporta el suspense necesario en éste género, no están trabajadas las escenas de flasbacks, las secuencias de asesinatos te dejan tan frío como el propio paisaje.
Y como ya anunciaba se dejaron el muñeco de nieve mucho tiempo al sol y se derritió quedando unos granos de café en el suelo.