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Santi Zeta rating:
9
6.5
138
Drama. Romance
It's November 1989, and the Berlin Wall is falling. In Stavanger, Norway, teenage boy Jarle has a great new girlfriend and is starting a rock band with his buddies. But when a new boy, the synth pop-listening Yngve, joins his class, Jarle is more fascinated than he wants to be, and the world as he knows it starts to crumble.
Language of the review:
- es
October 24, 2010
12 of 13 users found this review helpful
En lo personal disfruté mucho de esta película, aunque quizás se deba a que no tenía expectativas muy altas. Entretener no sé si entretiene, sobre todo para los que únicamente están entrenados en la agilidad y claridad del mainstream estadounidense, pero es agradable de ver. La historia es muy sencilla, casi insignificante; y relata el conflicto de un joven perdido en algún pueblucho escandinavo al descubrirse atraído por un chico recién llegado: Yngve. No es que sea sólo un chico, en realidad es la antítesis de Jarle, es aquello que Jarle nunca tendría que permitirse desear ¿Cómo podría Yngve ser su objeto de deseo, si es un hombre, si escucha electro-pop, si juega al tenis, si su pulcritud y colores pastel sencillamente desentonan con el punk ruidoso y desprolijo al que Jarle suscribe?
Y es que de hecho Jarle no se permite amar a Yngve, he aquí el conflicto, he aquí lo que posibilita el resto. Cuando Jarle accione de acuerdo con sus sentimientos las consecuencias le golpearán de manera insólita, (podríamos identificar el camino de Jarle como un tránsito de la adolescencia a la adultez, si quisiéramos). Al final, se agrega la locura como elemento que profundiza la trama y la empapa de la ambigüedad suficiente como para permitir múltiples interpretaciones.
La gran joya de la película, sin dudas, es la banda sonora. No es una cuestión menor, después de todo es la música lo que manifiesta de modo más evidente la estrecha relación de Jarle con su amigo y su novia, y es lo que le separa de modo más obvio de Yngve. La música es la herramienta mejor usada y es un fiel narrador desde "have you ever fallen in love with someone you shouldn't?" hasta "love will tear us apart". -Muy buena.
Y es que de hecho Jarle no se permite amar a Yngve, he aquí el conflicto, he aquí lo que posibilita el resto. Cuando Jarle accione de acuerdo con sus sentimientos las consecuencias le golpearán de manera insólita, (podríamos identificar el camino de Jarle como un tránsito de la adolescencia a la adultez, si quisiéramos). Al final, se agrega la locura como elemento que profundiza la trama y la empapa de la ambigüedad suficiente como para permitir múltiples interpretaciones.
La gran joya de la película, sin dudas, es la banda sonora. No es una cuestión menor, después de todo es la música lo que manifiesta de modo más evidente la estrecha relación de Jarle con su amigo y su novia, y es lo que le separa de modo más obvio de Yngve. La música es la herramienta mejor usada y es un fiel narrador desde "have you ever fallen in love with someone you shouldn't?" hasta "love will tear us apart". -Muy buena.
SPOILER ALERT: The rest of this review may contain important storyline details.
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Spoiler:
Sí, a mí también me la vendieron como una película de temática LGBT, pero tengo que disentir con esto. Desde mi humilde punto de vista la película se centra no en una relación homosexual sino en un préstamo de la tragedia: "la increíble facilidad con la que todo puede irse al diablo".
Jarle comienza el film teniéndolo todo: una posición cómoda respecto de sus padres, una novia que todos le envidian, un amigo incondicional, una ascendente banda de punk... Y es el elemento completamente irracional -el enamoramiento de Yngve, que además de todas las desventajas que ya nombré manifiesta un comportamiento evidentemente demencial- lo que posibilita ese final enemistado con sus amigos, privado de su amado, alejado de su padre...
La escena final con el colectivo y el flashback, creo, me apoyan en esta interpretación. Al final, nos queda el gusto de los accidentes azarosos que arruinan todo, de las acciones intempestivas que lo empeoran, y de la carga de la responsabilidad de nuestras decisiones que nos determinan.
Jarle comienza el film teniéndolo todo: una posición cómoda respecto de sus padres, una novia que todos le envidian, un amigo incondicional, una ascendente banda de punk... Y es el elemento completamente irracional -el enamoramiento de Yngve, que además de todas las desventajas que ya nombré manifiesta un comportamiento evidentemente demencial- lo que posibilita ese final enemistado con sus amigos, privado de su amado, alejado de su padre...
La escena final con el colectivo y el flashback, creo, me apoyan en esta interpretación. Al final, nos queda el gusto de los accidentes azarosos que arruinan todo, de las acciones intempestivas que lo empeoran, y de la carga de la responsabilidad de nuestras decisiones que nos determinan.