Otra película biográfica (aunque ésta es semi biográfica) que llega a las salas durante 2014 y 2015. Otra película contra el racismo con la que tan acostumbrado (casi llegando al cansancio) nos tiene el séptimo arte por estos años.
Selma es la historia de Martín Luther King y un grupo de activistas que luchan con mucha valentía por los derechos civiles de propios y ajenos, centrándose principalmente en la marcha que se realizó desde Selma a Montgomery en 1965.
La película está muy bien realizada, tiene muy buenas interpretaciones, los diálogos son acertados, no conmueven mucho, pero tampoco agotan al espectador con palabras innecesarias. La dirección de la directora es aceptable, pero pasa sin pena ni gloria. El resto es todo lo mínimo que una película de ésta clase de producción debe ofrecer, como lo es una linda fotografía, una buena ambientación de época, una buena banda de sonido y algún otro elemento más.
No entiendo bien cómo llegó a estar nominada en los Oscar 2015 a mejor película, pero haciendo un repaso por años anteriores, ya no debería sorprendernos, que los miembros de la academia a cargo de las votaciones, agreguen en las nominaciones éste tipo de sorpresa.
Para redondear, Selma no me aburrió pero tampoco me pareció muy buena, se deja ver, pero está lejos de ser una gran película.

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