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VALDEMAR rating:
7
7.2
46,515
Drama
Back in the late ’80s, Randy “The Ram” Robinson (Mickey Rourke) was a headlining professional wrestler. Now, twenty years later, he ekes out a living performing for handfuls of diehard wrestling fans in high school gyms and community centers around New Jersey. Estranged from his daughter (Evan Rachel Wood) and unable to sustain any real relationships, Randy lives for the thrill of the show and the adoration of his fans. However, a heart ... [+]
Language of the review:
- es
January 15, 2010
8 of 9 users found this review helpful
¿Alguna vez has visto a un pony engañado tan feliz y libre? Si alguna vez has visto un pony engañado, entonces me has visto a mí.
La mejor sinopsis posible de la película ya la hizo Springsteen en la letra de The Wrestler. Yo no puedo superar sus palabras, así que me limitaré a dejar un breve y prosaico comentario.
La película es cruda, emotiva, honesta, tierna, salvaje. El monstruoso y patético Mickey Rourke borda su personaje, igualmente monstruoso y patético. La bella y dulce Marisa Tomei enseña al monstruoso que para todo hay esperanza si uno es capaz de redimirse, y aunque él lo intenta, no está hecho para tal cosa. Lo suyo son los bajos fondos. En ellos brilla y es querido por todos. Fuera de ahí no sabe qué hacer consigo mismo.
Siempre me voy con menos de lo que antes tenía… canta Springsteen.
No sé si el retrato del mundo de la lucha libre que se hace aquí es o no realista, pero desde luego llama la atención lo educaditos y cariñosos que son entre sí todos estos cachalotes.
Interesante y buena película.
La mejor sinopsis posible de la película ya la hizo Springsteen en la letra de The Wrestler. Yo no puedo superar sus palabras, así que me limitaré a dejar un breve y prosaico comentario.
La película es cruda, emotiva, honesta, tierna, salvaje. El monstruoso y patético Mickey Rourke borda su personaje, igualmente monstruoso y patético. La bella y dulce Marisa Tomei enseña al monstruoso que para todo hay esperanza si uno es capaz de redimirse, y aunque él lo intenta, no está hecho para tal cosa. Lo suyo son los bajos fondos. En ellos brilla y es querido por todos. Fuera de ahí no sabe qué hacer consigo mismo.
Siempre me voy con menos de lo que antes tenía… canta Springsteen.
No sé si el retrato del mundo de la lucha libre que se hace aquí es o no realista, pero desde luego llama la atención lo educaditos y cariñosos que son entre sí todos estos cachalotes.
Interesante y buena película.