Y además de verdad, ¿eh?

Las aventuras de Condemor volvieron al año siguiente de la primera, por fortuna para todos nosotros. Si antes era el salvaje oeste lo que era carne de parodia, ahora es el mundo de los vampiros. Entre conde y conde la confusión está servida y Chiquito hará gala de un repertorio de expresiones y caras divertidísimas. El momento cena puede considerarse un hito humorístico en España. En realidad toda «Brácula» lo es, por qué no decirlo abiertamente y sin prejuicios.

Le sigue acompañando un simpático Bigote Arrocet y recuperamos a una bella Nadiuska, mito erótico de otros tiempos que ha tenido un duro destino. A destacar, un Héctor Cantolla como Conde Drácula que estremece con su voz, y es que es actor de doblaje, como no podía ser de otra manera.

No te la pierdas.