Click here to copy URL
Spain Spain · Honor al Sabadell!
Grandine rating:
7
Drama It follows the mutually supporting shenanigans of two psychologically marginalised Frenchmen. Patrick is a psychiatrist about to collapse under the weight of his own ennui; Rémy is an immature young man, introverted by the internet, his red hair and sexual innocence. The latter provides the former with a project and, bonding over the tenuous topic of their red-headedness, they lurch off into a self-perpetuating zig-zag, initially searching for confrontation. [+]
Language of the review:
  • es
October 12, 2010
18 of 24 users found this review helpful
El hijo de Gavras debuta en largo y no lo puede hacer de mejor manera. Compone una comedia dramática directa y sin concesiones. En ella, un joven (Rémy) pelirrojo conoce a un psicólogo (Patrick) cuyas inclinaciones y cuyo modo de encarar cada situación son radicalmente distintas. Así, una cinta que podría parecer otra de tantas donde un personaje alecciona a otro, y pretende enderezar su camino, termina deviniendo en una historia donde, como acontece a medida que avanza, el personaje de Cassel traza un camino, pero acto seguido el de Barthelemy decide reinterpretarlo a su mismo modo, y a partir de ahí Gavras engarza su mensaje y le confiere la dirección adecuada a su ópera prima, y por suerte, su estilo resulta totalmente distinto al de su padre. Más radical, pero probablemente menos comprometido, y ello es una de las mejores virtudes que puede llegar a poseer un hijo de cuyo padre ya se conocen todas las andanzas y terrenos pisados y por pisar.

Su principal eje, la dupla Cassel-Barthelemy, funciona a la perfección. El primero sigue demostrando ser un actor como la copa de un pino, y maneja su rol como si lo conociese desde la primera línea de guión, sorprendiendo en todo momento al espectador debido a sus distintas respuestas, y consiguiendo levantar en más de un momento la carcajada más mordaz, mientras el joven francés no le va a la zaga y complementa perfectamente el trabajo encauzado por el marido de Monica Bellucci. Y es que si en alguna faceta debía funcionar "Notre jour viendra" esa era precisamente la del complemento. La de observar como dos personajes que podrían permanecer fuera de campo en cualquier otro film, toman la manija y terminan siendo uña y carne aunque resulten como el sol y la luna, desgranando así el buen trabajo a nivel de guión realizado por Boukercha y el propio Gavras, y al final de la proyección uno termine comprendiendo ante que se encuentra: tanto su forma como su fondo ofrecen uno de los debuts más sugestivos y sorprendentes de los últimos años, y dan pie a una pieza tan singular, de la que ni siquiera el propio Costa Gavras podría reconocer el autor.
Grandine
Did you find this review interesting and/or helpful?
arrow