El cine esta para entretener. Uno se sienta en la butaca después de pagar cada vez más euros, para ver algo que le entretenga. Y si encima viene aderezado con algún mensaje que remueva conciencias mejor que mejor. Entro a ver la peli que nos ocupa sabiendo que esta Will Smith que lejos de ser un mal actor, no siempre ha hecho grandes películas. La primera hora es un mero pasar por lo que es un día cualquiera en la vida de un tío que se ha quedado solo en el mundo con su perro. Hay algo que inquieta en todo esto pero no es hasta la mitad del filme que nuestro héroe no esta tan solo como parecía. Una amenaza en la sombra se cierne sobre el.
La película tiene momentos brillantes, sobre todo algunas escenas en las que muchos pensaremos que es una tontería, pero había que vernos en la situación que envuelve al protagonista de la historia. El perro es una de las bazas de la película y los momentos de tensión, están resueltos con solvencia. Quizás, como ya se ha comentado en alguna otra crítica, sobra el mensaje puritano made in Usa pero se perdona, ya que a pesar de ser una película comercial, por una vez y sin que sirva de precedente, es buena