No se me ocurre ni siquiera nada demasiado ingenioso para calificar esta película; si es que ha de llamarse así. No tiene diálogos inteligentes, ni escenas emocionantes ni una trama original, cosa que en principio parecía que iba a ser por ciertas escenas que te descolocan.

Recuerdo haber visto hace mucho tiempo una película o serie o corto o algo en el que una cámara de fotos tenía el mismo efecto que lo que ocurre en esta película, o algo parecido. Creo que me gustó más que esto. Si yo fuera un profesor de cine y un alumno me presentara esto le diría: o me haces un corto con la misma idea o empiezas de cero porque esto tiene un cero como la silla más grande del mundo.

Otra de las basuras de metraje que hay que ver si quieres encontrar algo bueno.