Tom Tykwer y los hermanos Wachowski (saga Matrix) nos ofrecen una película absolutamente pretenciosa, del mismo estilo filosófico de "La fuente de la vida" de Darren Aronofsky, aunque algo más lograda.

Es una mezcolanza de historias de distintas épocas. Tres horas en que solamente destacan los efectos especiales y el montaje. Espectacular trabajo de los directores de fotografía y los encargados de la música. El resto nada... Son historias que no cuentan nada y con diálogos que dan vergüenza ajena.

Pretende hablarnos sobre los caminos de la vida, la muerte, el amor, el destino, las repercusiones al futuro e incluso al pasado. Pura filosofía barata.

La historia futurista del personaje "Sonmi-451" es la más interesante en mi opinión, aporta grandes dosis de entretenimiento y en ciertos momentos recuerda a "Blade Runner" y "El quinto elemento" por la ambientación, las naves, las luces de neón, etc.

En fin... Pasable... Destaca sólo como espectáculo visual.

Nota: 5/10