Mucho se había hablado de la nueva película de los hermanos Coen, en esta ocasión, en exclusiva para Netflix. Su nueva película es un western compuesto de seis historias. La película no ha recibido muy buenas críticas, dejando a la misma de bastante irregular.

Antes de empezar con la crítica, debo aclarar que, aunque me parecen unos cineastas con su propio sello y muy originales, no soy fan de los hermanos Coen, aunque adoro "El Gran Lebowski" (la mejor película de su filmografía), pero poco más. Como directos no tienen precio, pero a veces sus historias hacen aguas por todos lados.

En esta ocasión, vuelve a suceder lo mismo que en sus últimos proyectos, ya que, la dirección es fabulosa e intachable, pero el ritmo es irregular y uno no sabe muy bien que está viendo o que nos quieren transmitir los directores.

La primera historia es, seguramente, la mejor, ya que tiene un ritmo endiablado y es muy amena, pero, curiosamente, también es de las más cortas, lo cual es una verdadera pena. A destacar a un fabuloso Tim Blake Nelson, cuyo personaje da título a la película.

La segunda historia está protagonizada por James Franco, y es tan surrealista y entretenida, como mal finalizada. Aún así se agradece.

La tercera historia, con el gran Liam Neeson... no sé ni como clasificarla, pero me ha dejado bastante tocado... sobre todo por lo tediosa que llega a resultar.

En cuanto a la cuarta historia, protagonizada por Tom Waits, bastante sosa y aburrida, a pesar de un buen giro al final.

La quinta historia quizás sea la más larga, y no está mal del todo (sobre todo por el final), pero también deja un sabor agridulce.

En cuanto a la última historia... parece relleno y quizás sea, con la tercera, la más floja de todas.

El problema de la película, no es solamente que algunas historias sean mejores que otras, su tono irregular o que sea aburrida en muchos momentos, sino que uno no sabe que quieren contarnos los Coen, y mucho menos con finales tan abruptos y sin explicación alguna. Como cortos vale, pero para componer una película en seis actos, como que no. Entiendo que no la hayan estrenado en cines, porque no tiene razón de ser.

Por lo tanto, estaríamos ante una decepcionante película y otro traspiés (hola, "¡Ave, César!") de los Coen, que dirigiendo son sobresalientes y tienen un estilo único (eso no se lo quita nadie), pero cuyas historias no son aptas para todos los paladares (y menos si son todas tan crueles y con un humor tan negro marca de la casa). Si se hubiese mantenido el nivel de las dos primeras historias, estaríamos hablando de una gran película. Una lástima.

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