"Caótica Ana" es una historia preciosa y muy interesante, con un magnetismo especial, pero sus últimos 25 minutos son de un ridículo asombroso con un mensaje político simplón de niño de 12 años.

Evidentemente yo me quedo con la hora y media inicial en la que Médem nos cuenta la historia de Ana y sus vidas. Realmente la película era una bellísima historia sobre la vida. Médem convierte a su personaje principal en un simple vehículo vulgar para expresar sus convicciones políticas, y no sólo eso, también la convierte en un chiste de lo que Ana fue en sus anteriores vidas.

Ojala el film hubiera acabado cuando Ana llega a EEUU. Me hubiera ido muy satisfecho y "Caótica Ana" se hubiera merecido el sobresaliente. Exceptuando su final, la película es tan meritoria en todos los sentido que como mínimo he de ponerle un seis. Como en todas las películas de Médem, "Caótica Ana" es técnicamente asombrosa.


Bellísima pero con un final tonto y ridículo.