Un desternillante "mockumentary" dirigido por Jemaine Clement y (por el ahora famosísimo) Taika Waititi, que me saco varias carcajadas por la forma tan desenfadada y curiosa con la que son presentados sus protagonistas, una familia de vampiros que viven en un departamento en Nueva Zelanda.

A lo largo de 86 minutos iremos conociendo la vida, costumbres y cotidianidad que viven "Viago", "Deacon", "Petyr", y "Vladislav" cuatro vampiros de diferentes épocas, pero que viven juntos en la actualidad y su respectiva adaptación a la vida moderna.

Su "apacible" vida inmortal se encuentra con una nueva víctima, "Nick" a quien terminan por convertirlo en uno de ellos y por ende, su enseñanza como ser inmortal a partir de ahora.

Sin duda estamos frente a una de las películas más divertidas que se hayan hecho sobre estos míticos personajes, que en infinidad de proyectos han sido tratados como seres oscuros y enfocándose en esto último a la hora de retratarlos en la gran pantalla.

Sin embargo aquí, Taika Waititi yJemaine Clement (quienes también escriben el guión) construyen un relato que si bien se alimenta de esos tópicos y clichés, pero le dan un giro inesperadamente cómico y que funciona de mil maravillas.

Cada "gag", línea y diálogo (que se realiza a rajatabla) esta muy bien planificado, dosificado, preciso y si a eso le sumamos una puesta en escena increíble que ayuda a que nos creamos lo que estamos viendo, pues poco más tengo que exigirle, desde mi humilde punto de vista.

Por supuesto para tal labor es necesario contar con un reparto con el carisma suficiente para que, insisto, literalmente te creas lo que estas viendo. Todos están maravillosos y hasta se podría llegar a decir que "nacieron" para interpretar a tan alocados habitantes de este universo de "chupa-sangres".

Desde Jemaine Clement, pasando por Taika Waititi, y ni que decir de Jonathan Brugh, Cori Gonzales-Macuer, Stu Rutherford, Ben Fransham, Rhys Darby, Jackie van Beek, Elena Stejko y Jason Hoyte, todos tiene su momento de gloria en esta peculiar historia.

Ojo a la banda sonora y claro los títulos de crédito finales que termina por coronar una joya digna de ser visitada dentro del llamado sub-género del "Mockumentary" o de los vampiros o de la comedia en general.